Mi vida en el infierno.

Capitulo 3

Manuel me coge acurrucandome más a el.

-Ari -digo cortandoles todo el rollo- ven un momento a la cocina porfa.

-Voy -espeta mi amiga-

-Tia que no se que hacer -digo cerrando la puerta de la cocina- a mi Manuel me gusta pero no se Ari.

-Vamos Tania, por liarte con el no vas a perder nada. -dice mi amiga-

-Es que es guapísimo -digo mordiendome el labio- cuando me a empezado a acurrucar en su pecho e sentido como las típicas mariposillas en el estómago pero más bien eran por los nervios. Además aparte me da miedo por si me hace daño o algo, sabes que la anterior vez no lo pase bien que digamos, y bueno, ya sabes no me gusta hablar del tema. -digo derramando una lagrima- no quiero llorar.

Pero eso se me hace inevitable, las lágrimas ya amenazan con salir.

-Voy al baño a lavarme la cara -le digo a mi amiga-

Subo las escaleras y llego al baño. Una vez dentro cierro la puerta.

Me siento en la taza del váter y empiezo a llorar desconsoladamente.

Todo mi mundo está derrumbado.

Diréis madre mía esta chica esta siempre llorando pero... ¿vosotros a que lo estaríais si os estuviera pasando todo lo que a mi?

Pues obviamente.

La puerta del baño se abre y yo sigo con la cabeza agachada.

-Ari por favor déjame un rato sol... Manuel -digo con asombro al verlo ya que me pensaba que era Ari-

Vuelvo a agachar mi cabeza y me tapo la cara con mis manos.

Manuel se pone de cuclillas e intenta quitarme las manos de la cara pero no lo consigue.

-Por favor, mirame. -dice este con su dulce voz-

Me destapó poco a poco la cara.

Miro sus ojos color café pero enseguida me limito a apartar la mirada porque me intimida muchísimo.

-Por favor, mirame -dice este por segunda vez-

Fijo mi mirada en la suya.

-Oh mi niña -dice este quitando las lágrimas con sus dedos pulgares que recorren mis mejillas-

La verdad es que Manuel siempre me a tratado muy bien, llevamos juntos desde el colegio pero ahora yo he perdido confianza pero el nunca la perdió conmigo.

Cuando fue la muerte de mi padre el y su hermano asistieron al velatorio y vinieron a darme el pésame.

-¿Que te a pasado? -dice el curioso-

-Espera un momento no creo que el sitio más cómodo para hablar de estos temas sea el baño -empiezo a reír un poco-

Agarro mi movil y le mando un WhatsApp a Ari.

Mejor Amiga❤

Yo: Amiga ¿me dejas tu habitación para hablar con Manuel?

Ari: Sisi para hablar🙄🤣

Yo: Que si amiga. ¿Me la dejas o no?

Ari: ¿para qué preguntas si sabes que obviamente te voy a decir que si?

Yo: te amo amiga.

Fin de la conversación.

-Vamos a la habitación de Ari -espeto-

Me levanto de la taza,  abro la puerta y este me sigue.

Una vez en la habitación de Ari, soy la primera en entrar y me tumbo en la cama.

Manuel pasa para poco seguido cerrar la puerta y echar el pestillo.

-¿Para que echas el pestillo? ¿Me quieres violar o que? -le miro con cara de pervertida-

-En la vida haría yo eso -dice tumbandose al lado mía- bueno cuéntame

-Espera -pongo mi cabeza en su pecho- listo.

Este rie.

Me empiezo a poner muy nerviosa.

-Lo siento pero es que esto no es fácil para mi -digo derramando unas lágrimas sin que el no se dé cuenta-

-Tomate tu tiempo -me mira-

Este chico me vuelve loca, hace que se me quiten todos los males.

Miro su boca, dios.

Poco a poco, el se va acercando más a mi al igual que yo a el.

Nuestros labios se rozan pero ninguno de los dos se atreve a dar el paso.

Así que lo doy yo.

Juntamos nuestros labios en un bonito beso, y ahí es cuando me doy cuenta de la persona que me gusta.

Mi estómago parece un huracán de mariposas.

Nuestros labios siguen fundiéndose en ese delicado beso, cojo su labio inferior con mis dientes y tiro de el delicadamente.

Continuara...