La pequeña de Papi🍼🔥 *Daddy Kink*

Pesadilla.

Me retuerzo cerrando fuerte los ojos, podía sentir como sudaba

~Izzy ayudame, por favor!~

Era la voz de Alex, se encontraba a un en el suelo con su mano izquierda sobre la herida en su hombro de la cual brotaba mucha sangre, quise moverme pero mi cuerpo no respondía

~Que esperas?! Te lo ruego Isabelle..~

Sentía mucha desesperación e impotencia, quise gritar y no salió ningún sonido de mi boca por más que lo intenté insistentemente.

~No quiero morir aquí..no me dejes~

Sentía como mi cuerpo era atraído por una fuerza invisible, en un abrir y cerrar de ojos podía ver como caía en un precipicio oscuro interminable hasta que llego al final y despierto de golpe.

--Alex!!-- grito, me encontraba muy agitada por lo que intenté respirar profundo para tranquilizarme

--Que sucede?-- entra un alarmado Aiden por la puerta, tenia un cigarro en sus manos y estaba sin remera, al parecer se encontraba ocupado.

--y..yo nada, solo tuve una pesadilla..-- murmuro con la voz temblorosa al recordarla y suspiro --estoy bien..p..pero...papi podrías decirme, por favor, si..Alex está bien?, sólo quiero saber eso y no volveré a nombrarlo, lo juro-- hablo rápidamente y lo miro suplicante

--No es de tu interés-- murmura seriamente y le da una calada al cigarro, sólo eso respondería?

--Claro que lo es, Aiden por favo..-- no termino la oración cuando su rostro de desfigura del enojo. Doy un pequeño grito cuando golpea la pared detrás de mi y deja el encendedor sobre la mesa luego de prender otro cigarro, sus manos temblaban y apenas podía sujetarlo bien entre su dedo medio e índice.

--Eres una maldita desagradecida! Acaso no ves todo lo que hago por ti?!, haría cualquier cosa y lo sabes, pero a ti no te importa una mierda!-- se había acercado tan rápido que no pude retroceder, una de sus manos apretaba fuerte mi mandíbula, no pude evitar toser al sentir el olor del humo que desprendía de sus labios al hablar.

--A..Aiden yo..-- intento calmarlo, sus ojos estaban rojos y su labio inferior temblaban.

--Papi joder!, soy papi para ti, cariño-- besa mis labios con un brusco contacto el cual no correspondo.

Suena su celular y mira mis ojos fijamente --si no cambias tu actitud tendré que castigarme, estas advertida-- finaliza y sale de la habitación con su celular contra su oreja.

Tenía que escapar, Aiden no estaba bien y no significaba más que peligro.
Miro alrededor de la habitación, ninguna ventana, Solo un pequeño mueble al lado de la cama donde reposaba un encendedor, claro!, lo utilizaría para poder soltarme.

Me estiro lo más que puedo y logro agarrarlo, encendía, pero debía doblar mucho la muñeca para que la pequeña llama quemara la cuerda
--vamos por favor..-- murmuro nerviosa sin dejar de estar atenta de algún ruido que delate la aproximación de Aiden a la habitación --solo un poco más..--

La soga se afloja y desato mi otra mano lo más rápido que puedo, cuando de repente logro distinguir unas pisadas --mierda, jodida mierda..--

Escondo el encendedor bajo la almohada y pongo la soga alrededor de mi mano y el cabezal fingiendo un nudo, se abre la puerta y respiro profundo intentando no verme lo suficientemente nerviosa como para delatarme.

--Princesa, sólo vine a decirte que mañana a primera hora debemos hacer unas cosas juntos que te encantarán..-- sonríe y se acerca dando un beso en mi frente, sentí que el tiempo iba mas lento de lo normal, por un momento creí que me había descubierto --Así que descansa pequeña--

Sale de la habitación y suelto todo el aire que había retenido sin darme cuenta.
De la que me había salvado.