Nueva vida.

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Buen día Princesa -entra Aiden con una bandeja es sus manos con lo que parecía un desayuno- como dormiste bebé?

-no respondo pero me siento en la cama, realmente estaba hambrienta-

Te pregunté algo -dice con el ceño fruncido- bien, entonces no comes -voltea con dirección a la puerta-

Bien! E..estoy bien -digo rápidamente y aunque no podía ver su rostro sabía que estaba sonriendo-

-voltea y efectivamente estaba en lo correcto- estoy bien que? -me mira fijo aun sin dar un paso-

-mi estómago se retorcía por el hambre y el delicioso aroma que lo que traía en esa bandeja no ayudaba- y..yo.. Estoy bien..papi.. -murmuro rendida y suspiro-

Así me gusta bebé -deja la bandeja en mis piernas- espero que te comportes o nunca más te soltaré. Si? -besa cortamente mis labios y suelta mi mano derecha para que pueda comer-

-no pasan ni 3 segundos y ya me encontraba comiendo de manera casi desesperada-

Eso pequeña, tienes que alimentarte bien -sonríe y acaricia mi cabello-

Y..yo... -dudaba si preguntarle pero necesitaba saberlo- ..mm..Alex está bien?

-la sonrisa desapareció de su rostro y se tornó sombrío, en ese momento me arrepentí de haberlo nombrado- eso no te interesa.

Claro que me interesa -exclamo frunciendo el ceño- papi... Por favor dime, solo necesito saber si está vivo

-toma mi mano libre y vuelve a atarla a la cama- descansa princesa -murmura secamente y sale de la habitación con la bandeja cerrando la puerta detrás de él-

PoV Aiden

Por qué jodida mierda le importa tanto ese imbécil?! -me encontraba encerrando en mi habitación bebiendo un vaso de whisky-
No volverás a verlo nunca más pequeña, tengo por seguro -murmuré con odio para luego darle un último trago al vaso y pararme un poco mareado-
Eres mia, Isabelle.

Narrador omnisciente

-el hombre de aproximaba a la habitación con el ceño fruncido, había bebido de más y eso se notaba a lo lejos.

Abrió la puerta donde Izzy se encontraba durmiendo y se tomó el tiempo de apreciarla. Era hermosa, su cabello reposaba libremente sobre la almohada, sus labios entre abiertos, su pecho subía y bajaba con calma, apenas podía escucharse su respiración, sus ojos cerrados donde en ese momento la estrella eran sus pestañas, extensas y curvadas a la perfección. Ella era perfecta.

Se acerco sin dejar de mirarla, estaba completamente enamorado de ella, realmente no quería hacerle ningún tipo de daño pero su obsesión y posesión eran por mucho, los sentimientos que lograban dominarlo-

Princesa, despierta -murmuró con voz ronca besando el cuello de la chica con delicadeza-

-Ella se removió en su lugar hasta que logró despertase- A..Aiden?.. Que haces? -su voz temblaba-

Te haré mía, Princesa, siempre mía -Aiden subió las manos acariciando los brazos de la chica, notó como la piel de ella se erizaba, eso le encantó, terminó el recorrido al dar con las manos de ella y las desató para luego quitar la camisa de ella besando todo su torso-

Joder Aide...-no la dejó terminar estampando sus labios contra los suyos-

Dime papi -metió su mano dentro del pantalón y bajo las bragas de la chica acariciando su coñito con suma delicadeza- no sabes cuanto te deseo, cuanto te necesito.

-ella suspiró y cerró sus ojos, tal vez él podría ser como antes, tal vez podría acostumbrarse a esto y...y solo tal vez olvidar a Alex-

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Hasta aquí el de hoy. 🖤
Quieren un PoV Alex?🙈

La pequeña de Papi🍼🔥 *Daddy Kink*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora