Avenida 240 ¡! Terminada

Capitulo 1

El clima parece neblinoso al salir de su casa a las seis en punto de la mañana, lo cual indica que por la tarde el sol saldrá a todo su esplendor.

Eso es lo que odia de tener que usar un maldito traje todo el tiempo.

Conduce con cuidado, escuchando música de su estación en la radio favorita.

De la nada, la frecuencia deja de ser la misma, y el molesto ruido al no haber señal, lo obligan a cambiar de estación en el semáforo siguiente.

Noticias.

¿Avenida fantasma? De esto hablaremos en la historia de hoy. Desde hace décadas, la misma vieja historia se repite: en esta zona de la gran avenida 240, para salir de la ciudad, los autos por más nuevos que sean se detienen sin razón. Los locales afirman que se debe a la desaparición en el bosque de aquel chico de 19 años, llamado Erick Colón, hace más de...

Detiene el auto con un ligero freno.

-No puede ser real, él realmente no existe- repite en voz alta.

Los pitidos comienzan a sonar, y recuerda que acaba de detener los vehículos, así que recupera el curso.

Erick no existe, es todo lo que se ha repetido desde hace 15 años. No puede olvidar aquel día en que todos lo tacharon de loco, por decir que había un chico en el bosque. Eso fue lo equivalente a tres psicólogos que lo ayudaron a admitir que Erick no es real y su mente lo fabricó, como si fuese un amigo imaginario.

Estaciona su vehículo con precisión, y toma su portafolio para subir a su oficina.

-Señor Pimentel- susurra la voz de su secretaria a sus espaldas -Necesitamos cerrar este negocio y ellos quieren que vaya usted personalmente- le entrega los contratos.

-¿Donde nos citaron?- pregunta, siguiendo su curso.

-Fuera de la ciudad- habla siguiéndolo.

Joel no dice nada, lo menos que quería ahora, es tener que acercarse a la avenida "fantasma".

-¿Quiere que le avisé a su esposa, señor?-

-No Brittany, puedo decirle yo, porque saldré mañana. Avísale a los inversionistas que nos vemos a primera hora, en el lugar que se les haga más fácil- desabotona su saco para sentarse.

-Con permiso- sale, cerrando la puerta.

La cabeza del rizado gira en torno a la idea de que tiene que afrontar su pasado, para poder terminar de superar sus traumas. Al fin y al cabo, Erick no es real, ¿Cierto?