Dedicado a @GodlsA-Woman-LikeMe
- Prometelo, cabron-
Andrés termino de servir el vino en la copa de Sergio, dejo la botella en medio de la mesa y a paso lento fue a su asiento, al otro lado de la mesa, para después apreciar a su hermano moviendo algo incómodo el vino en su copa.
Con su característica elegancia tomo la copa de cristal, mientras no perdía de vista los movimientos de su hermano.
Decidido a ser el que tenga el control de la conversación, la inicio.
-Mañana empieza todo.- al no obtener respuesta de su acompañante lo llamo por su nombre, provocando que el menor levantara su mirada para dejarla en el. Con su atención asegurada continuo hablando.- Quiero que me prometas una cosa.- con un tono de voz pasivo y una mirada seria llevo la copa a sus delgados labios.- Si las cosas se ponen feas, escaparas, no te quedaras a esperar en el angar.
Su hermano hizo un mohin de sonrisa para dirigir sus vista la tela de la mesa - Nada va a salir mal- le aseguro mientras posaba su vista en el de nuevo nervioso.
Andres sonrió sin ganas mirándolo serio.
- Sabes también como yo que todo puede salir mal.- bajo la mirada a su copa y volvió a hablar- Solo entraré ahí, si me prometes que cuando todo se vaya al carajo, te iras con María y no dejaras que os cojan. La cuidaras. Prométeme también que baja ninguna circunstancias enviaras a María a esa ratonera. Prométeme que no la pondrás en peligro, Sergio
- No te voy a prometer nada.- le respondió con una pequeña sonrisa mirándolo a los ojos.
Andres sonrió enojado mirándolo con una ceja arqueada.
- No creo que seas tan hijo de puta para que la expongas a ella.- le respondió con incredulidad con los dientes apretados. Al no obtener respuesta alguna, Andres dirigió su mirada al vino, enojado.
Un incomodo silencio los atrapo.
- Si no lo prometes, te quedaras sin capitán esta misma noche- le amenazo- Ya sabes como soy yo.- le sonrió victorioso, pero al escuchar las palabras de su hermano su sonrisa se esfumo.
- No hay problema, ella estará aquí a primera hora, lista y con una sonrisa asumiendo tu cargo.
Jaque-Mate.
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El solo mirarla era una acción que Sergio realizaba con gusto.
Su ojos con esas pestañas abundantes y rizas eran capaz de iluminar hasta las almas mas oscuras con esa inocencia propia de ella; su sonrisa junto sus hoyuelos abrazando su boca le brindaban a el un sentimiento de armonía; ¡Oh! Su risa, esa risa que parecía un canto hecho por los mismísimos ángeles, provocaban que sus latidos se acelerara y que incluso se desbordara su corazón. Aunque fuera era biológicamente imposible.
Estaba mal, absolutamente mal que se sintiera así.
Aunque no fuera el único en hacerlo...
Aunque ya estuviera Raquel.
El prefería llamar a eso amor paternal.
-¿En que piensas?- le pregunto mirándolo con una hermosa sonrisa, sacándolo de sus pensamientos. Sergio, bajo un poco la mirada para toparse con los ojos negros de la menor.
Ambos ya estaban afuera, mirando a una distancia discreta la casa ardiendo en llamas y al lado de ellos habían seis bolsas de gran tamaño con las cosas que lograron sacar previamente.
Ya había anochecido y la brisa comenzaba a hacerle efecto a la de hebras oscuras, y su falda no le ayudaba mucho a aislarse del frió. El anotarlo le entrego su saco,cosa que agradeció la baja con una sonrisa y un beso en el cachete que Sergio decidió ignorar.
El saco de gala le llegaba hasta las rodillas y sus brazos lograban tapar por completo los brazos de ella.
-En que pasara desde ahora con vosotros. Temo que todo comience a ir mal, no puedo impedir que las cosas no vayan de acuerdo a mi gusto- y por primera vez se permitió a si mismo confesarle a alguien su inseguridad sobre el plan.- Todos los acontecimientos que ya han pasado, me demuestra que todo puede acabar mas rápido de lo que teníamos previsto...- se detuvo al notar una mano que se entrelazaban con sus dedos, dándole un fuerte apretón al final.
- No pienses en eso, todo va a salir una chimba y mas conmigo a cargo.- le hablo con una seguridad contagiosa que Sergio agradeció con una sonrisa.
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-Ten cuidado, por favor - le pidió Sergio en medio del abrazo con voz baja- No dejes que nadie te haga sentir mal, se fuerte y que los sentimientos no tomen el control.- le susurro con los labios pegados en su cabeza, dio un beso en la coronilla y acuno su cara con sus manos.- Y recuerda:...
-Nada de relaciones personales ni tampoco de decirles mi nombre o algún tipo de información personal a alguien. - le respondió en voz baja mirándolo a los ojos- Lo se. Me lo has repetido desde que soy una niña. - sonrió con los ojos cerrados permitiendole al mayor memorizar cada facción de su rostro. Sergio sonrió con los labios sellados mientras se acercaba a darle un beso en la frente a la menor.
-Te quiero, Maria.
-Y yo te quiero a ti, Sergio.
La menor sello el abrazo rodeando sus brazos en el cuerpo del mayor, apoyando su cabeza de su hombro. Era baja, le llegaba al hombro y para mirarlo a los ojos tenia que alzar la cabeza.
Con inocencia pensaba solo en el calor que le brindaba el cuerpo, del ahora llamado profesor. Deseaba que todo acabara, sin siquiera haberlo empezado.
Pero en ese momento lo único que quería era que ese abrazo no acabara, y aunque no le gustara pensarlo, esa podría ser una despedida.
-Sabes que cuando Andres se entere de que voy a entrar se enojara mucho contigo, ¿verdad?- le hablo aun pegada a su cuerpo.
- Lo se.- Maria se carcajeo mientras Sergio la apretaba mas a el.- Helsinski te estará esperando para darte el mameluco y la mascara.- Recibiendo un asentimiento por parte de la menor dejo complacido que el tiempo pasara el tiempo en brazos de la fémina.
Estuvieron abrazados hasta que el reloj de Sergio sonó una fastidiosa melodía, avisándoles así que el momento de entrar a la fabrica.
-¿Tienes todo?- le paso la maleta negra tras un sonido de afirmación ambos emprendieron viaje a uno de los puntos ciegos del la fabrica- No olvides llamarme cuando llegues.
Y tras un ultimo abrazo la menor se colgó la maleta negra en el hombro y salio corriendo hacia una de las ventanas que había en una oficina del primer piso, la cual convenientemente y de acuerdo al plan, estaría abierta.
Sergio se dedico a mirarla hasta en el momento que escapo de su campo de visión.
Decidido apretó las nalgas y fue corriendo devuelta a su motos para arrancar y subir la velocidad. Debía llegar lo mas rapido que pudiera, al final de la noche tenia que ir a la casa de Raquel.
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La Casa De Papel [Seul]
FanfictionQuien diría que la mente maestra del profesor pondría de cabecera de uno de los planes más maravillosos y arriesgados de toda la historia España a una simple niña. Después de que todo comenzara a irse a la mierda, dentro de la Fabrica De Moneda y T...