El chico de mis sueños - ☆PerthSaint☆

Capítulo 1 { Quiero, y necesito }

Narra Perth:

El agua recorriendo cada centímetro de mi cuerpo, la adrenalina del momento, el reloj está corriendo, todo esto causa una ola de emociones que no paran de causarme tanta euforia.

Y tampoco quiere que dejen de hacerlo.

Necesito llegar, necesito romper mi record, estoy cerca de hacerlo, sólo un poco más... Sé que puedo...

—Tú puedes...

Ahí está... No...

¡Maldición! No otra vez.

—¡¿¡¿PERTH QUE ESTAS HACIENDO?!?!

Ese grito me hizo salir del trance en el que estaba donde podía ver esa imagen luminosa en mi mente logrando mover mi corazón de una manera indescriptible.

Se sentía bien, pero no ayudaba a concentrarme.

Me había quedado en el medio de la piscina, había parado de nadar repentinamente.

—Lo siento, Mark... — dije observando al chico que me está fulminado con la mirada. Mientras yo solamente nadaba hasta el punto de inicio dónde se suponía que tenía que llegar.

—¡¿Cómo puedes decir "lo siento"?! Es la sexta vez que lo intentas, y no logras batir tu récord, Tanapon — me dijo el chico que ahora está extendiendo una de sus manos dentro de la piscina.

Yo en enseguida la agarré, y Mark me ayudó a subirme al filo de la piscina, y yo decidí sentarme por un momento ahí.

—¡Lo sé! No tienes que contar las veces en las que...

—Te quedas pensando en medio del entrenamiento — completó dándome una palmada en la espalda, y sentándose justo a mi lado.

Pasé mi mano por mi cabello mojado lanzando todo este hacia atrás, después mi mano pasó por mi cara quitando las gotas de agua que estaban fluyendo por mi frente.

—No me digas que aún...

—¡Si! Aún, y lo más frustrante de todo, es que siempre es el mismo maldito sueño.

—¿Y... Ya lo encontraste? — me preguntó riéndose un poco por mi expresión llena de estrés.

—¿Acaso me ves tranquilo? ¡Claro que no le he encontrado!

—Oye, Perth, no creo que encontrarlo sea la solución a tu problemita — dijo Mark soltando un suspiro.

—Claro que si, encontrarlo es la solución de hacer que se vaya de mi mente, y así podré batir mi record, además de estar listo para competir.

—Tal vez necesitas...

—¡Ni siquiera lo pienses! — interrumpiendo lo que él iba a decir le di una advertencia — aún no...

El chico que está a mi lado se empezó a reír, y poco a poco se levantó.

—Esta bien, tigre... — hizo un pausa, y se rió aún más.

!!!

(Patada)

¡¡Hijo de su madre!!

—¡¡Mark!! ¡¡Ven acá!! — grité dentro de la piscina, el idiota me había pateado la espalda haciendo que cayera de frente.

—¡¡Suerte buscando al chico de tus sueños!! — el muy maldito se estaba riendo. Agarró su bolso rápidamente saliendo del lugar cómo alma que lleva el diablo.

—Imbécil...

• ☆ • ☆ • ☆ •

—¿Has encontrado algo? — le pregunté al chico alto que estaba sentado en frente de mi mirando su computadora, y tecleando varias cosas.