One Shots. || Joe Mazzello.

Lilith...

Lilith, la suprema, la gran bruja, esposa pérdida de Caín,jamás reconocida ante los ojos de Dios, sirvienta eterna de Satanás.

La mayoría de los mortales que alababan y eran fieles seguidores del Dios falso conocían una historia muy diferente a la que leerán hoy.

Lilith y Lucifer, tuvieron una creatura, más hermosa que Dios mismo, más travieso que Lucifer y más inocente que Lilith ante las palabras de Satanás, esta pequeña creatura creció y crío en sus primeros años entre el fuego y la miseria del infierno.

A los 5 años, la creatura y Lilith huyeron a la superficie, en un intento en vano de que el rechazará su naturaleza, huyendo de Lucifer y las malas intenciones que tenía con el niño, queriendo volverlo en anticristo, Lilith, al ser la madre de las brujas, una fuerte y poderosa hechicera inmortal, hizo un poderoso conjuro para borrarle la memoria y asegurarse de que estuviera a salvó.

Mientras tanto, en lo profundo del Inframundo, Lucifer criaba a su nuevo engendró, una pequeña niña de ojos curiosos y cabello tan naranja como el crepúsculo del atardecer, mintiendo y diciendo que ella era su "primogénita", criandola como la princesa y futura reina de todo el Inframundo y sus almas.

Poco a poco, la niña se convirtió en una poderosa y gran muchachita, en su cumpleaños número 18, le había pedido a su "Papi" salir a la superficie, Lucifer, puso muchos peros, pero al final, terminó agradandole la idea de que su hermosa primogénita conociera el mundo de los mortales eh hiciera un par de travesuras como solo ella las sabía hacer.

Oh gran error fue dejar salir a su pequeña estrella de la mañana, a su "primogénita" y su única luz entre toda esa negra y macabra obscuridad a la que decía hogar, a la superficie.

Al llegar ahí, recorrió todo el lugar, de norte a sur y de este al oeste, Nueva Orleans era un lugar único y con una chispa de magia, la tienda de artes obscuras llamo tanto su atención, tenían objetos que se asemejan a los que había en su hogar, el travieso castaño en la recepción había llamado tanto su atención, que su vista solo estaba puesta en él.

-¿Buscas algo cariño?

El tono de voz, la forma en que lo pregunto, todo, absolutamente todo había hecho temblar su cuerpo, el castaño no tenía ni idea de lo que hacía y lo que causaba en ella.

• Soy Eleonora Lucius,¿Está es tu tienda?

Sus ojos curiosos recorriendo de pies a cabeza a el chico, la tienda y los objetos que había en ella, en absoluto, esto se volvía cada vez más en un travieso juego.

- Soy Joe, Joe Mazzello, y no, está tienda pertenece a mi madre.

Con cada sonrisa coqueta, cada roce y con cada risilla traviesa, los chicos aumentaban más su cercanía y la temperatura del lugar, parecía todo en camara lenta, quién diría que el primogénito y la hija del mismísimo Satanás estaban a punto de adentrarse a un peligroso juego que les traería demasiados problemas después.

En cuanto Lilith entro a el lugar y sintió ese gran poder, llegando casi a superar el suyo, al ver de nuevo esos traviesos ojos en la chica, ese flameante cabello y esa esbelta figura supo entonces que lo que estaban a punto de hacer, era simplemente una aberración.

Alertó de inmediato a Mazzello la fría ráfaga de viento, y antes de lograr artículo palabra alguna, la chica frente a sus ojos salió volando por los aires contra una de las estanterías, iba a protestar ante el comportamiento sobreprotector de su madre pero calló de inmediato al ver la sonrisa ladina de Eleonora y su cuerpo sin ninguna herida o lastimadura.

Entonces, lo único que pudo hacer es esconderse bajo el mueble rezando por su vida al falso Dios.

° Fuera de aquí, lucifer, no sé cómo nos encontraste, pero a Joe no le tocaras ni un pelo.

Eleonora solo soltó una sonora y seca carcajada, estaba a punto de atacar cuando su padre apareció frente a ella, dándole una fuerte bofetada, haciendo que sin importar que, Joe saliera de su escondite y fuera tras de ella, pero la firmeza de la mano de su madre lo contuvo en su lugar, no permitiría que él se volviera como ese monstruo.

– Lilith, oh hermosa y perfecta Lilith, amada mía, regresa a tu forma natural.– al no tener respuesta alguna de Lilith, este enfureció de inmediato, ella haría lo que el ordenará. –¡¿Acaso no escuchaste mujer?! Soy tu maldito amo, y te ordeno el que regreses a tu forma natural ahora mismo.

Sin más remedio, soltó a Joe y al rededor de ella apareció una brillante aura, cegando a todos los presentes, poco a poco, está fue bajando de intensidad mostrando frente a ellos, una mujer de tes clara, de alrededor de 20 años y con largos cabellos castaños, pareciera que tuviera la supuesta edad cuando nació el chico.

Los ojos asustados del chico la recorrieron una y otra vez, retrocediendo en el proceso, a su madre, le dolía el ver a su hijo huir de ella temeroso ante lo que hizo.

–¿Qué mierda le hiciste a mi madre?

Hello babys, adapte está historia, era de uno de mis one shots de Rami pero pues meh, pronto subiré el siguiente capítulo de está historia, besossss.