"Un domingo ahí en tu cama, con ropa liviana;
un domingo de deseo, oh, tocando el cielo.
Un domingo de película al lado mío,
después de hacerlo diez veces, quedémonos dormidos."
.
.
.
Dejó que él la abrazara celosamente a su cuerpo, desde atrás, pasando sus brazos por la cintura de ella. Sí había cumplido, sí la había llevado a cenar, y después de eso, habían ido a su casa.
Prácticamente habían entrado para tener sexo, ya que Bastien comenzó a besarla apenas cruzaron el umbral de la puerta. Y así estuvieron toda la noche, hasta la madrugada, cuando él salió de la cama para buscar algo de comer.
La alarma del celular del azabache comenzó a vibrar, y estiró uno de sus brazos para apagarla, besando suavemente el hombro de Kim.
—Debo ir a buscar a Luke, tú quédate un poco más en la cama —sonrió, antes de dejar de abrazarla y salir de la cama.
La jovencita siguió durmiendo, abrazando una de las almohadas, y Bastien la tapó con cuidado con las mantas. Aún debía tomar un baño, y después de pasar por la casa de Candice, iría con el niño a comprar algo para el desayuno.
***
Se desperezó en la cama, y sonrió al ver que había un oso junto a ella. Lo tomó, y leyó lo que decía en la tarjeta "Por una y mil noches más así a tu lado ¿O es muy pronto para pedirte algo más?"
Sonrió cálidamente, y abrazó al oso, sintiendo el aroma de Bastien impregnado en él, y en ella también. Dejó al peluche sobre la cama, y fue al baño a prepararse.
El médico le había dicho que en veinte minutos llegaría con el niño para pasar el día juntos, los tres, por lo que Kim quería tomar un baño y ya estar vestida.
Aún seguía desnuda desde la noche anterior.
***
—¡Hola Kim! —exclamó con una gran sonrisa Luke, al ver que la joven castaña estaba en la sala.
—Hola gatito lindo —sonrió abrazándolo, acariciando suavemente su cabello—. ¿Cómo la pasaste ayer? ¿Te divertiste?
—No, no la pasé bien —le dijo en un tono molesto, algo... Dolido.
—¿Por qué no?
Bastien entró a la casa, y fue a la cocina, a preparar el desayuno para los tres, mientras los dejaba hablar en la sala.
—Ellos quisieron ir a cenar a un lugar muy costoso, y a mí no me gusta ir a esos lugares, y... Y Candice lo sabe —murmuró bajando la cabeza—. Allí van humanos malos, que me miran feo, y a mí no me gusta, pero ellos quisieron ir igual, dijeron que nos sentaríamos en una mesa alejada ¿Y sabes que creo? Qué no lo hicieron por mí, sino para no sentirse avergonzados de mí.
—Oh cariño, estoy segura que no fue así —le dijo afligida, al ver los ojitos tristes de él—. Lo habrán hecho para qué tú te sientas más cómodo.
—No me hubieran llevado ahí si fuera así.
—¿Hablaste con tu mamá, Luke? ¿Le dijiste cómo te hace sentir todo esto?
—Ya le dije que no volveré a su casa, yo me quiero quedar con mi papá.
Kim lo abrazó, y le acarició suavemente la espalda. Ella no era nadie para decirle al niño que era lo correcto, que era mejor para él. Porque si Luke se sentía mejor con su papá, entonces su madre debería intentar entenderlo.
—Tu papá me dijo que compraron cosas muy ricas para desayunar.
—¿Te gusta la tarta de durazno y crema? ¡A mí me encanta! —exclamó sonriendo.
—A mí también —sonrió suavemente, observando a ese hermoso gatito rubio frente a ella.
¿Cómo era posible que pudieran hacerle desprecio a un niño tan lindo cómo él? No entendía a los humanos realmente. Desde que ella había sido una niña, habían pasado bastante años, y no mucho parecía cambiar para los humanos.
Aún seguían siendo igual despreciables e intolerantes.
Kim miró al niño, mientras Luke le contaba de una caricatura, y la castaña se preguntó ¿El marido de Candice querría a Luke? ¿O él también lo despreciaría como su familia?
...
A muy poco de dormirme, pude terminarlo 😪❤️💞
