Cambio de género (TMNT)

Capítulo 78: Regreso a casa

Durante los siguientes dos meses Raphael y Leonardo se la pasaron en la cabaña de los O'neil. Durante las tardes entrenaban y en las noches antes de retirarse a descansar veían un rato la televisión para después dormir juntos. No obstante, a pesar de que la intención de ambos era recuperar la confianza perdida en Leonardo, aún así se daban tiempo para estar juntos, ya que había ocasiones en las que salían a pasear por el bosque o iban de compras con su amigo Bern, o miraban las estrellas en el tejado.

Raphael durante este tiempo llamaba a su padre para decirle el progreso de Leonardo, y ésta aprovechaba para hablar con su familia y verificar que estuvieran bien sin su presencia, a lo que ellos siempre respondían que sí, pero que igual los extrañaban, y que si iban a estar presentes para su cumpleaños, ya que la fecha estaba cerca y no querían celebrarla hasta que regresaran, y ella respondía que estaría para ese día sin importar nada.

A una semana exacta de la fecha, los dos hermanos se encontraban entrenando como todas las tardes, el objetivo: tirar al oponente al piso.

R- Muy bien Leo, veremos si puedes vencerme esta vez.

L- (Asiente).

R- Hayime.

Durante varios minutos ambos se encontraban parejos, pero en un movimiento imprevisto por parte de Raphael su hermana se fue de espaldas unos metros lejos de éste. Parecía que iba a golpear el piso cuando de pronto da una voltereta y queda de cuclillas para después dar un salto lanzar un ataque directo. Raphael se preparó para recibirla, pero ella ejecutó un ataque a sus pies que a duras penas pudo esquivar para después darle un golpe en la mandíbula y mandarlo a volar quedando finalmente en el suelo.

R- (Sobando su mandíbula) Ow! Eso no me lo esperaba. Parece que por fin pudiste vencerme.

L- (Algo agitada) Si. Eso parece. (Le ofrece su mano) Te encuentras bien?

R- (Aceptando el gesto) Estoy bien. Has mejorado bastante. Ya empiezas a parecerte a la Leo que yo recordaba.

L- Tal vez no pueda ser la misma al 100%, pero ya me siento mucho mejor. De hecho, he pensado que tal vez sea hora de volver a New York.

R- Estas segura de eso? No es por lo que el par de enanos te han estado diciendo en las últimas semanas?

L- No. Me siento lista para volver a casa.

R- De acuerdo. Partiremos mañana a primera hora.

El resto del día arreglaron lo necesario para su regreso. Sacaron la comida, taparon los sillones, tiraron la basura y avisaron a su amigo Bernie para que vigilara la casa en su ausencia, y es que desde que tuvieron su encuentro con los castores del sueño Bernie se encargó de ayudarles con la casa para que la próxima vez que vinieran no tuvieran problemas de mantenimiento. Además de que era el único humano al que podían asistir cuando necesitaban algo.

En la noche, cuando ambos se habían acostado, Raphael acariciaba el cuerpo de su amada mientras besaba su cuello.

R- Segura que no quieres estar aquí mas tiempo? Podemos quedarnos mas tiempo si tú quieres.

L- No Raphael, en verdad quiero volver. Extraño a los chicos y a papá.

R- Lo sé. Yo también. Es sólo que... aquí no nos molestará nadie para tener tiempo para nosotros.

L- (Volteándose a verlo para tomar sus mejillas) Raphael, lo nuestro no va a cambiar estemos donde estemos, no te preocupes. Además, papá y los chicos nos dieron su aprobación.

R- Si pero, aquí no necesitábamos moderarnos enfrente de ellos, además yo quería ver si podíamos... llegar a más.

L- Entiendo (besa su frente) No te preocupes, yo te diré cuando esté lista para ese momento sin importar en donde nos encontremos.