Romance de oficina [TodoDeku]

Capítulo IV Una fiesta

Un joven de cabellos peliverde sentado frente a un gran escritorio repasaba la agenda curiosamente vacia de su jefe, sin embargo paso su atención al teléfono que este le dio exclusivamente para temas de trabajo al escuchar como sonaba un tono común y aburrido.

Contesto al llamado y pensando en la recepcionista no tardó en formar una frase adecuada para tratar a los que llamasen.

-Empresas Todoroki, al habla su secretario, ¿en que puedo servirle?- dijo Izuku amablemente.

-Muy buena presentación Midoriya, parece que sabes mucho de esto- exclamó del otro lado de la línea una voz que reconoció pertenecía a Uraraka.

-Gracias señorita Ochako- agradeció el peliverde.

-Olvida la formalidad puedes llamarme Uraraka- dijo la castaña.

-Gracias Uraraka, ¿en qué puedo servirle?- preguntó volviendo al punto de su repentina llamada.

-La señorita Yaoyorozu esta esperando por su cita con el jefe, exige que no se posponga más su encuentro- dijo la castaña con un tono particularmente serio.

-Gracias Uraraka, le informaré y en un momento te llamó- dijo el peliverde cortando seguidamente la comunicación.

Se levantó de su escritorio y se dirigió a la oficina de su jefe.

Tocó la puerta y casi al instante escucho la voz de su jefe permitiéndole el paso.

-¿Sucede algo Izuku?- pregunto el de cabellos bicolores alzando su mirada de los papeles en el escritorio hacia el peliverde.

-La señorita Yaoyorozu esta abajo exigiendo encontrarse con usted- dijo Izuku calmo más le descolocó un poco la mirada molesta que apareció en el rostro de su jefe, su rostro era serio pero le era muy notoría la ira en sus ojos.

-Que entre- exclamó luego de unos momentos de silencio.

El peliverde asintió y estaba por retirarse cuando el contrario atrajo nuevamente su atención.

-Luego de diez minutos con ella entra y dí que mi próxima cita esta por comenzar- ordenó el bicolor con una mirada calma ante su repentina idea.

El peliverde una vez fuera de su oficina llamó a recepción.

-Hazla pasar- dijo Izuku.

Unos momentos después el ascensor se abrió dando paso a una joven alta de cabellos negros sujetos en una coleta que vestía una falda y sacó gris con unas zapatillas negras, avanzó con una sonrisa de "satisfacción" y una mirada de superioridad.

-Buen día, usted debe ser la señorita Yaoyorozu- exclamó cordial el peliverde haciendo una pequeña reverencia a la recién llegada.

-Si- dijo cortante mientras miraba sus uñas postizas (acrilicas).

-Pase, el presidente le espera- dijo Izuku dando paso a la contraria e ignorando completamente su pechonalidad sin ningún interés al respecto.

Izuku volvió a su oficina sentándose en el sofá con su mirada fija en la hora que marcaba el reloj en la pared.

...

Mientras tanto en la oficina de Shoto Todoroki.

-Buen día Todoroki- exclamó la azabache que tomo asiento al ver como el contrario le hacia una seña.

-No dispongo de mucho tiempo Yaoyorozu, ¿por qué la urgencia?- dijo el de cabellos bicolores con una seriedad aterradora.

-Has estado posponiendo nuestra cita desde hace tres semanas- respondió con un deje de molestia oculto tras su falsa sonrisa.