L-Inked

Parte 9: Con Ojos Cerrados

Okay, quizás había sido un espacio demasiado grande para no responder, pero quizás tampoco se ha notado lo terriblemente sorprendida que estaba.

— ¿Puedo saber qué demonios hace mi mejor amiga en el lugar donde nosotros tuvimos nuestra primera cita, esperando a que lleguemos?

— No, bueno, pensé que quizás querrías tener una noche tranquila con tus amigas y luego ir por un trago o por unas papas fritas post sushi para quitarte lo japonés del labio inferior.

— Créeme que no entiendo. — sin notarlo, mi pie izquierdo estaba bajo la rodilla derecha y mi posición había dejado de ser decente hacía un poco más del tiempo que me gustaría admitir.

— No es nada, no tiene trampas, he rentado el lugar para que puedan tener un lugar tranquilo para ustedes cuatro por un rato.

— ¿Minzy y Boomie también van a estar ahí? — exclamé en un chillido llevando ambas manos hacia mi boca. Bien... el vestido que llevaba era pequeño, iba maquillada para matar y sinceramente no sentía deseos de estar con mis amigas más que con él en ese momento.

— Cariño, vamos, sé que las adoras y...

— ¡Obvio que las adoro! Esas niñas estuvieron ahí cuando a ti te valió nueve hectáreas de trigo mi intento de reacción en el mundo real, cuando tú estabas lejos y todo lo demás se fue al demonio junto contigo. Pero si vamos a salir con ellas avísame por lo menos. — Pero por todos los cielos.... ¿Y mi temperamento dónde se había esfumado? ¿Qué fue de mi paciencia?

— Quizás me merecía eso— dijo él con total y completa calma.

— Lo lamento... — suspiré y miré por la ventanilla. Después de todo, sólo había rentado un local entero para nosotras cuatro y nos atenderían de lo mejor. Era un lindo gesto.

Fuimos en el auto escuchando a Selena Quintanilla y Gloria Trevi en un suave pero descarado intento de hacer que suelte mis deseos de canto, pero sus suaves sonrisas y pequeñas conversaciones me daban mayor felicidad que el cantar.

Llegamos al hermoso lugar escondido justo debajo de un gran árbol, bellísimo y con un par de autos en la puerta. Mi corazón se estrujó al saber que vería a mi mejor amiga después de los menudos desaires que le había otorgado, pero estaba brincando de felicidad al saber lo que venía.

Me dejó en la puerta de entrada, bajó a abrirme la puerta y con un beso en la mano me guio hacia el ingreso. Entré y vi a dos de mis mejores amigas en el mundo ahí

— ¡Park! — la animada voz de Boomie me recibió.

Entré, nos saludé, y la noche empezó con entera serenidad. CL se mostraba ligeramente distante pero nadie puede resistirse a una noche japonesa, con sake y sushi y deliciosos onigiris mientras vemos Tri-Gun. Mi mejor amiga me miraba fijamente en algunos momentos, y sus bellísimos ojos me atravesaban.

¿No es pintoresco cómo funciona la amistad? Quiero decir... somos como dos piezas de rompecabezas ya que ella tiene tantas cosas que yo quisiera pero al mismo tiempo sé que me complementa. Su fortaleza y mi sensibilidad se tejen en hermosas hebras que hacen, a su vez, lazos y lazos que mantienen juntas nuestras esencias en un hermoso ramillete de verdades y confianza. Mi confidente... Sé hasta lo que va a pensar en algunos momentos pero no puedo ni imaginar cómo va a regañarme en otros después de confesar mis aventuras amorosas.

Puedo leer lo que intenta decirme: que la pasa bien, que la comida es buena, pero que quiere hablar conmigo al respecto. Que no debería confiar en él, que me ha lastimado y probablemente lo vuelva a hacer, que no haga exactamente lo que estoy a punto de hacer.