La curiosidad mató al gato.
(CASSIE)
Un ruido horrible hace que salga de mi sueño profundo. La cabeza va a explotarme. He empapado la almohada con mis babas. Absorbo y trago saliva. Me giro hacia Harriet y al verla no doy crédito.
-Harriet, por dios, ¿quieres parar de hacer eso? La cabeza me va a explotar-ella levanta la cabeza para poder mirarme por encima de su portátil con los ojos muy abiertos. Está usando un sacapuntas eléctrico, por el amor de dios.
- ¿Te molesta, Cassie? -hace una pausa- pues te aguantas. Yo tuve que aguantar que anoche llegases pegando gritos a las tantas de la madrugada.
- ¿Gritos? -me incorporo con trabajo, me paso las manos por la cara y parpadeo un par de veces. No entiendo que me está diciendo.
-Sí, gritos. Y para colmo entraste en la habitación acompañada de un chico. Cassie dijimos que nada de chicos en esta habitación, al menos mientras yo estuviese en ella.
- ¿Vine con un tío? ¡¿Qué dices?! ¿Qué tío? -pregunto poniéndome algo nerviosa ¿Qué está diciendo? No me acuerdo de nada. Joder siempre me pasa cuando bebo, pierdo el control.
- ¿No te acuerdas de nada? -me dice mirándome por arriba de sus gafas de culo de botella.
-No, no me acuerdo Harriet ¿Con quién vine?
-En cuanto te dormiste, me pidió disculpas por tu comportamiento, se me presentó como Ayden. La cosa es que yo ya había escuchado hablar de él.
- ¡¿Qué?!- Me levanto de la cama de un salto y me miro de arriba abajo he dormido con la camisa que llevaba ayer y las bragas. No puedo creerlo. Madre mía que vergüenza. Lo último que recuerdo es estar sentada en un sofá jugando a un estúpido juego donde no paré de beber chupitos. ¿Me vio así? ¿Me trajo a la habitación? ¿Por qué lo haría? ¡Dios mío Beth!
Me pongo las manos en la cabeza y paseo de un lado a otro inquieta. Cojo mi IPhone y marco su número. Descuelga al momento.
-Que...-contesta con voz triste.
-Beth, siento mucho lo de anoche, soy una hermana mayor de mierda. No recuerdo la mitad de la noche.
-Lo raro sería que lo recordaras, Cas.
- ¿Estás enfadada?
-Lo estaba... Nunca te había visto así, y me preocupé. Menos mal que tu amigo se prestó a llevarnos.
-Él... ¿se ofreció?
-Sí, y cargó contigo hasta el coche y luego hasta tu habitación. Estabas que no parabas, gritando y diciendo mil tonterías. Yo no podía contigo.
Dios, noto como me pongo roja por momentos. Ridícula, soy ridícula. Se guro se partió de risa a mi costa.
-Joder Bethany, lo siento. Se me fue de las manos, bebí demasiado. Perdóname ¿vale?
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FEARLESS (ACTUALIZANDO)
RomanceCassie Whiliams no puede permitirse volver a perder el control, en su primer año de universidad hizo cosas que no quiere volver a repetir. Y todo parece estar bien, hasta que aparece él. Desde su llegada a la universidad comienzan a pasar cosas...