Capítulo 88: Incendio en los Muelles (Parte 3)

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Media hora después, no había nadie que siguiera con vida, y todos los barcos ya se habían hundido en el fondo del mar. Me mantuve quieta entre las llamas, viendo caer hasta el último de estos desagradables sujetos.

"¿Se terminó?" preguntó Kataryna que aterrizó fuera del infierno viviente.

"Sí."

Si no fuera por mi afinidad al fuego y mi buen control sobre Energía Mágica, yo igual me habría calcinado y sofocado.

"¿Vas a detener este incendio o yo debería hacerlo?"

Levanté mi mano y toqué las amables flamas. Eran leales a mi persona, obedientes, aun así, también eran un poder que tenía hambre de destrucción. Mi afinidad con este elemento tenía sus propios defectos. A veces era inestable y fácilmente podría perder control sobre ellas, pero la peor parte era que me susurraban para que las dejara libres y pudieran extender su furia sobre el mundo.

Era un deseo fácilmente entendible, y si lo obedecía, me sentiría calmada, relajada, incluso en paz conmigo misma.

"Sí." Le respondí a Kataryna mientras mantenía resguardado ese deseo y apagaba todo el fuego a mi alrededor.

Era como si simplemente se les acabara el combustible.

"Entonces debemos regresar a la capital. Me tomé la libertad de hablar con el Señor de esta región, y aceptó tomar cuidado de todos los relliars hasta que llegara un oficial de la capital. Me aseguré de que entendiera que su Majestad no sería tan amable si llegara a escuchar que esta pobre gente fue tratada de una mala manera hasta que su situación se resolviera."

Probablemente lo amenazó

Ahora sí, este asunto estaba terminado. Los delegados humanos habían sido castigados y tuve venganza por lo que le hicieron a Shelly.

"Vamos de regreso." Dije con una sonrisa.

Con alas extendidas, emprendimos vuelo de vuelta a la capital del Reino. Nuestro viaje sería uno relajado, ninguna de nosotras tenía prisa, y durante nuestros descansos, recuperaríamos bastante energías antes de partir de nuevo. A este paso, nos tomaría alrededor de 2 días llegar a nuestro destino.

Cuando volvimos, recibimos las agradables noticias de que las negociaciones con el Rey Kragarr Ruvus habían resultado de manera favorable y que el tratado de comercio fue oficialmente firmado. No solo eso, pero también firmamos un acuerdo mutuo de asistencia militar. Si algún reino resultaba estar bajo ataque por una nación extranjera, el otro ofrecería en la mejor medida posible el aceptar refugiados y enviar fuerzas para apoyar en lo que se requiriese.

Esto era, en efecto, un momento disfrutable, y el Rey sostuvo un gran banquete en nuestro honor.

En ese momento, finalmente pude ver a Shelly de nuevo. Estaba cubierta de ropajes que escondían su apariencia rasurada. Para los relliars, su pelaje era como las escamas de un dragón, una parte de su identidad y belleza natural. No podía imaginar lo que tuvo que haber sentido cuando ese monstruo la despojó de su mayor orgullo.

Cuando entró a la habitación, todos se quedaron callados y la observaron.

"Mewhola~" dijo con una mirada tímida en sus ojos y se acercó a nosotras.

Vestía una bufanda de terciopelo larga color púrpura sobre su cuello y cabeza. Su cola también estaba oculta entre su ropa.

Me levanté de mi asiento y me le acerqué.

Me vio por un momento y luego bajó la mirada.

"Lo sieto" dijo y luego empezó a sollozar.

"¿Por qué?" me arrodillé ante ella y puse amablemente mi mano sobre su pequeña cabeza.

100 DE SUERTE Y LA HABILIDAD DOMADOR DE DRAGON Volumen 3 (2ºparte) [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora