Mi primera reacción es empujarlo lejos de mí aunque sé quién es la dueña de aquella voz. No estoy en peligro.
Ella mira a su hijo frustrada, suspira y se lleva una mano al cuello para apartarse su cabello castaño. Oh, se le esta agotando la paciencia.
Sra Dae: Jimin. -su tono de voz es demasiado intimidante, logra ponerme los pelos de punta- este no es el momento ni el lugar para hacer lo que sea que estén haciendo. No estás pensando con la cabeza fría y te estás dejando llevar por los sentimientos, controlate y no la pongas en la zona de peligro.
Sentí la intensa necesidad de disculparme como si yo hubiese sido la que cometió el error. Pero me mordi la lengua. No tengo por qué disculparme cuando es su hijo el que me acosa. Como si no te murieras por tenerlo cerca, ruedo los ojos ante ese desagradable pensamiento.
Sra Dae: regresa a la mesa t/n.
Asiento y salgo en dirección a la mesa donde todos platican a gusto. Miro a mi padre quien está sumido en la conversación, agradezco que probablemente no se haya dado cuenta de mi ausencia...ni la de Jimin.
Jisung: no creo particularmente en todo lo que Jimin dice así que te voy a preguntar claro y directo ¿es tu novio?
Tú: fuimos novios pero...no fue real. Te agradecería que no habláramos de él, gracias.
Jisung: si tanto te desagrada podríamos hacerlo sufrir un poco. Puedo fingir ser tu novio.
Tú: -examino su cara para descubrir si está bromeando pero no puedo ver nada- ¿disculpa?
Jisung: -sonríe- estoy bromeando linda. Aunque si creo que Jimin necesita una lección.
En eso estamos de acuerdo pero no se lo hago saber.
Jimin regresa totalmente inexpresivo ¿qué le habrá dicho su madre? ¿Ella sabrá porque hui de su casa? Miro a la señora Dae, ella me sonríe de oreja a oreja y luego se sienta en su lugar para unirse de nuevo a la conversación.
El mesero llega con la comida y no tuve otra intención que no fuera comer, repentinamente tenía apetito y deseaba devorar esa deliciosa carne que tengo en frente. Tomo el tenedor, el cuchillo y corto un trozo el cual llevo a mi boca. Su sabor me hace soltar un gemido de sastifacción. Hace mucho que no disfruto de una comida así.
Continuo alejando todos mis pensamientos de ese momento. Corto otro trozo de carne pero ante mí visión aparece un tenedor con otro trozo de carne que no es el mío.
Tú: ¿qué haces?
Jimin: quiero que pruebes el mío, también está delicioso.
Miro el tenedor y estoy segura que me brillan los ojos, también se mira delicioso. Abro la boca y me como ese trozo de carne, es completamente diferente a la mía en sabor pero no deja de ser deliciosa.
Continúo con mi comida. De vez en cuando acepto los bocados que Jimin me ofrece.Todos nos miran extrañados por tal acto pero no le di importancia aunque sé que esto traerá problemas en casa.
Una hora más tarde todos habíamos terminado de comer y la conversación aburrida de negocios comenzó de nuevo.
No entiendo nada de lo que hablan y estar con el celular no es una opción pues recibiría mi castigo por comenter tal falta, así que me hundí de nuevo en mis pensamientos, todos entorno a una pregunta... ¿realmente deberíamos hablar sobre lo que pasó?
[~]
Apresuro los pasos para llegar lo antes posible a mi fortaleza pero esos no son los planes que tiene mi padre.
Padre: como que estuviste muy cariñosa con esos chicos ¿no? A pesar de que insinuaste que las cosas con el tal Jimin no habían ido bien.
Tú: y no lo fueron padre. Lo siento, solo intenté ser amable porque creí que lo beneficiaría a usted después de lo que la señora Dae le dijo.
Padre: ¿qué hiciste con ese mocoso en el baño?
Tú: bueno pues yo hice lo que usualmente se hace en los baños padre...él no sé.
Padre: no me vengas con tus respuestas inteligentes t/n, sabes que me molestan. Debería darte una paliza para que no lo olvides.
Tú: creo que ya estoy acostumbrada a eso.
Joder ¿no sólo lo pensé?
Estrelló su mano contra mi mejilla respondiendo mi pregunta interna. Esta cachetada no activa mi sistema de alarma, no, activa mi furia ¿por qué todos se creen con el derecho de hacerme lo que se les pegue la regalada gana?
« Porque tu se los permites »
Padre: tengo unas ganas intensas de hacerte llorar de dolor maldita mocosa pero no lo haré porque sé que no me conviene. Quiero que este proyecto sea mío y no dejaré que tu me lo arruines. Sube a tu habitación antes de que pierda el control.
Sabe que estoy cerca de Jimin, y cualquier cosa que me haga podría llegar a oídos de la señora Dae y ¿quién quiere trabajar mano a mano con un maltratador abusivo?
Espero que la pérdida de ese proyecto le duela tanto como a mi madre y a mí nos duele su maltrato constante, espero que pague pero que ni se le ocurra que somos las responsables de sus acciones.
Subí a mi habitación sin decirle ni una sola palabra. Al llegar quito mi vestido quedándome solo en ropa interior, me acerco al espejo de cuerpo completo y me observo con atención; tengo marcada la espalda, las costillas, el abdomen, se me hizo un moratón en la pierna que no tenía hace algunas horas y ahora tengo la mejilla rojiza y mi mano me duele como el demonio. Vuelvo a untarme pomada y coloco un pantalón de pijama y una camiseta.
Hago mi tarea y luego de una hora y media me quedo dormida encima de todas mis cosas. Sueño con un pelinegro de ojos preciosos y sonrisa deslumbrante.
[~]
Salí prácticamente corriendo de casa con la intención de no llegar tarde a mi segundo día de clases y gracias a Dios el quedarme dormida no me pasó factura. Llego con 5 minutos de anticipación.
Saludo a Jisung con entusiasmo mientras me siento a su lado. Dormí realmente bien por primera vez en mucho tiempo, me sentí cálida y protegida y eso me reconforta a más no poder. Hoy nada puede arruinar mi buen ánimo...ni siquiera esas zorras que andan detrás de mi pellejo.
Antes de que la clase iniciara tocaron la puerta. El maestro se gira para encaminarse hacia la puerta y abrirla. Se me eriza el vello y lo siento antes de verlo.
Maestro: adelante. Presentese ante sus compañeros.
Puedo jurar que la baba se me cae con solo verlo. El uniforme le queda a la perfección, va peinado hacia atrás y siento su aroma hasta aquí. Escucho a las chicas soltar pequeños chillidos de admiración.
Jimin: Hola a todos, me llamo Park Jimin. Espero que puedan ayudarme a ponerme al corriente con las clases.
Si mi padre tiene conexiones por supuesto que su madre también las tiene.
Él me mira y me guiña un ojo. Sé que es consciente de que también le dedique una mirada de admiración y eso me avergüenza.
Maestro: Jisung les ayudará a ponerse al corriente.
Jimin: ¿les? -eleva una ceja y sonríe de lado-
Maestro: a ti y a t/n.
Voy a estar cerca de él...y eso en vez de molestarme me emociona. Sí t/n, eres una completa estúpida.
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ENAMORANDOME DE LA CHICA NERD | PARK JIMIN.
FanficUna parte de mi sonríe mientras la otra muere sin ser notada. Estoy harta, cansada. Observo como las puertas de escape se cierran lentamente, no corro, no lucho. Simplemente me quedo quieta aguantando, aguantando cada golpe, cada insulto, cada conde...