ENAMORANDOME DE LA CHICA NERD | PARK JIMIN.

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟑𝟓

Después de todo lo que sufrí mi estabilidad emocional y mental quedaron hecha trizas, quede completamente destrozada.

Fui un fantasma andante. No comía, no dormía y si lo hacía me era inevitable recordar todo lo que había ocurrido. Las crisis se volvieron parte de mi día a día, me cerré en banda con absolutamente todas las personas, el miedo, la ansiedad, la depresión, las pesadillas se volvieron mis aliados... y sinceramente no tenía la capacidad de lidear con la responsabilidad de una relación cuando ni siquiera podía lidiar conmigo misma. Él no se merecía sufrir, no merecía ni mis cambios de humor, ni mis crisis, ni mucho menos todos mis desprecios...lo mejor que podíamos hacer en ese momento era terminar nuestra relación y fue justamente lo que hicimos.

Por supuesto que no planeabamos que fuera definitivo, no podía ser definitivo, no podíamos perder lo bonito que teníamos pero necesitaba primero ordenar todo mi desastre y él lo aceptó. Juró que iba a esperarme con los brazos abiertos.

Por otro lado, el hombre causante de mis pesadillas terminó tras las rejas y legalmente perdió todo, mi madre pasó a ser la dueña de su imperio lo que logró enfurecerlo más pero por supuesto, él no podía hacer nada al respecto. Y yo me alegré de la desgracia y miseria en la que terminó, aunque todos estamos de acuerdo en que merece mucho más.

Luego de que lo condenaron y con el caso archivado mi madre consideró que lo mejor para mí era recibir terapia psicológica con uno de sus buenos amigos (no sabía que tenía amigos) el cual laboraba en New York, yo no puse ninguna resistencia porque deseaba más que nada olvidarme de todo lo que pasó.

Nos mudamos y mientras avanzaba con mis sesiones terapéuticas intenté con todas mis fuerzas terminar el colegio en línea, gracias a Dios fueron considerables con mi situación y lo permitieron.

Después de terminar el colegio había concentrado todo mi empeño en las terapias, entendí muchas cosas y me permití perdonar muchas otras y lo más importante: entendí que nada de lo que pasó fue mi culpa. Ha sido un proceso largo y complicado pero ha dado frutos y me enorgullezco de ello.

Estos dos años que llevo trabajando en mi misma me ha hecho comprender realmente quién soy, lo que valgo, lo que merezco y lo que no...solo que todavía no decido hacía dónde voy, estoy conciente de que ya es momento de que tome una decisión respecto a mi futuro pero todavía no me queda tan claro, William dice que me tome mi tiempo pero creo...que ya tomé demasiado.

Madre: William me ha comunicado de que entrará a un programa de ayuda a niños de la calle que han sufrido de abusos. -dijo poniéndo delante de mí la cena-

Nuestra relación ha mejorado considerablemente, ha sido la persona en la que me he apoyado este tiempo, la que me ha consolado en momentos de llanto, la que me ha auxiliado en las pesadillas nocturnas, la que me calma en las crisis, se comporta como una verdadera madre y no podría estar más agradecida. Se siente bien sentir el amor materno, un amor al que ya había renunciado.

Tú: ¿si? No me lo ha comentado ¿cambiaré las fechas de las sesiones? -ella se sienta en su silla con su plato de comida lista para devorar-

Madre: cariño, el programa se lleva a cabo en Corea, además tiene familia ahí que lo necesita por lo que ha decido mudarse...creo que nosotras también deberíamos regresar, tengo asuntos pendientes que no pueden esperar y llevar la empresa desde otro país no es nada fácil, es momento de que me ponga al frente de todo y lo sabes.

William no es solo mi terapeuta...es mi amigo y ahora se va...y yo deseo tanto regresar ¿es esto una señal?

Tú: vale, estoy de acuerdo.

Madre: ¿en serio? Sé que regresar te traerá recuerdos y...

Tú: estaré bien, puedo controlarme madre.