ENAMORANDOME DE LA CHICA NERD | PARK JIMIN.

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐𝟓

Advertencia ⚠️
Este capítulo contiene escena para mayores de edad, por lo que si no es de tu agrado recomiendo dejar de leer.

Siento como un montón de pares de ojos nos quedan viendo como si hubiesen escuchado lo que me susurraron al oído y sé que solo está en mi imaginación, que es imposible que hayan escuchado porque cuando levanto la mirada todos siguen conversando como si nada, pero eso no impide que me avergüence y me sonroje con solo pensar en la posibilidad.

Además, las oportunidades están bastantes reducidas. Él no hará nada con la chica presente.

Me obligo a respirar, lo miro con los ojos entrecerrados y el muy cínico se ríe ¡en mi cara!

Maestro: ¡muchachos, a desempacar! Nos vemos en el comedor a la hora de la cena y por el amor a cristo ¡socialicen! Están aquí para eso. 

Seguimos a Wendy a una de las tantas cabañas. Por dentro son bastante acogedoras, dan aquella sensación de estar en un lugar en el que realmente te puedes relajar y dejar en casa tus problemas. Descubrimos que solo hay dos habitaciones.

Wendy: considero que lo más lógico es que sea Jimin el que tenga su propia habitación, nosotras compartiremos la otra.

Toma sus cosas y entra en una de las habitaciones ¿quién la nombró líder de la cabaña?

Tú: -entrecierro los ojos- ¿cómo lograste que quedaramos en la misma cabaña?

Jimin: un mago nunca revela sus secretos. -me guiña un ojo-

Tú: sí pero tu no eres un mago. Suelta la sopa.

Jimin: vale, tal vez puede que se me haya escapado decirle al maestro que podía intentar conseguirle una cita con mi madre. -se encoje de hombros, no tiene la decencia de sentirse culpable- obviamente no va a conseguir una mierda pero bueno...casi todo se puede comprar y yo solo lo metí en la bolsa.

Tú: no me lo puedo creer. -sonrío- pero no me ves a mi quejándome por esto. -le beso los labios brevemente-

Jimin: te ayudaré a desempacar.

Entramos en la habitación en la que se encuentra Wendy, nos da una que otra mirada mientras sacamos de mi maleta las cosas necesarias pero casi siempre parece sumida en sus pensamientos. Ella ya ha de saber que somos pareja y debe estar preocupada por su tranquilidad ¿o debe estar juzgandonos? pero hoy ni su tranquilidad, ni su opinión, ni mi reputación importan. Un momento después y tras un arduo trabajo en equipo terminamos con nuestra sencilla labor.

En la habitación de Jimin desempacamos entre risas, besos y bromas así que nos demoramos mucho más.  Es como una burbuja de felicidad que ruego que no explote en mi cara.

Jimin: estas tocando mi ropa interior.

Bajo mi mirada a la pequeña bolsa de viaje que tengo entre las manos. Me encojo de hombros.

Tú: voy a quitartela esta noche así que...no creo que sea relevante el hecho de que la esté tocando.

Jimin: -me sujeta de la cintura- tu repentino descaro me esta volviendo loco.

Sus labios se acercan lentamente a los mios y el impacto me hace estremecer todo el cuerpo, su lengua se introduce en mi boca y sus manos entran sin timidez alguna por debajo de mi blusa. Sus labios intensos encienden el fuego en mi interior.

El toque en la puerta nos separa.

Wendy: los muchachos ya se están reuniendo, es mejor que salgamos también. -vuelve a insistir con el golpe en la puerta-