La mesa de los chicos populares

4.-Un plan

Tegan me mira sonriente, gritó a los cuatro vientos que me amaba, yo lo miro con rabia.
Esto solo es una jodida broma y si quiere jugar con fuego, pues juguemos con fuego.

Bajo de la tribuna y me dirijo hacia él.
Alzo la cabeza y lo miro con rabia, seguidamente pone su mano sobre mi mejilla y la acaricia.

Acerca su cara hasta mi oído y susurra.—¿Ves, Ferrer? te dije que no había nada más importante que yo.—una risa se le escapa y no puedo contener más mi rabia.

—Eres un jodido estupido.—sonríe y Boom, me besa.

Ah la madre.

¡Cállate conciencia!

Doy una patada en su entrepierna y se separa por el dolor.—¿Así quieres jugar? Juguemos, Tegan.—salgo del estadio y escucho los pasos apresurados de alguien detrás de mi.

Pienso que es Tegan y me volteo para romperle la cara al muy hijo de... pero al voltear veo que solo es Shiro y sigo con mis pasos.
El me alcanza y habla.

—Wow, que intenso el partido ¿no?—ríe pero yo ruedo los ojos, no estoy para chiste ahora.—Bien, estás muuuuuy molesta, ¿qué harás al respecto?

—Vengarme, de todos.—

—¿De todos? ¿Por qué?—Detengo mi paso y me volteo hacia él.

—Porque todos son cómplices, y tanto peca el que mata la vaca como el que le agarra la pata.—

—tu solita te dijiste vaca.—ríe y sigo indiferente.—perdón por el chiste.—hace una pausa.—¿Cómo te vengarás?—dice ya más serio.

—Tú solo observa, ¿si?—

-•- -•- -•-

—¿Me puedes repetir lo que harás?—pregunta Shiro. Ha pasado una semana desde lo del partido y ya he estado observando a los chicos, solo falta saber como vengarme.

—Bien.—ruedo los ojos, se lo he dicho tres veces en el día.—Empezaremos con los Kruize, seguiremos con Luke, luego con Thian, después con Soren y al final con Tegan.—

—¿Por qué al final Tegan?—

—Para que se sienta como un capitán que poco a poco pierde a su ejército entero.—

—Excelente analogía eh.—suelta una risa.

—Lo sé, lo sé.—sonrío.

—Y que hacemos en la plaza?—

—Blake Kruize viene aquí todos los días a esta hora, es el blanco perfecto.—sonrió malévolamente.

—¿Y qué piensas hacer?—

—Creo que ya te había dicho que tú solo observarás.—

—Uy pues perdone usted, señorita.—

—Lo veo, lo veo.—Blake Kruize está parado a punto de pedir un café y se me ocurre una idea.—voy a hacer el plan, haz lo que quieras mientras, te llamo cuando termine.—

—De acuerdo, espero.—sonríe.

Camino hacía donde Blake se encuentra

—Hola, Blake.—lo saludo amablemente.

Que estúpida.

No soy estúpida, conciencia.

—Hola.—dice indiferente.

—¿Qué haces?—pregunto mirando al suelo, conciencia tenía razón, soy estúpida.

—Nada.—dice seco.

—Vamos Blake, que Tegan y yo nos llevemos mal no significa que tú y yo igual.—

—Okey.—este chico ya me cansó.

Es duro de conquistar.

Número 1, conciencia: no lo estoy tratando de conquistar.
Número 2, conciencia: ¿eso no es de una película?

Es un meme, dah.

—Podemos hablar?—le digo suplicante.

—¿De que?—vuelve a decir seco.

—Me gustaría que fuéramos amigos, es que el día que me defendiste de Tegan creí que eras un chico muy amable, no me hagas creer lo contrario.—Pues técnicamente si fue el que más amable se portó cuando Tegan me echó de la mesa.

—Bien.—esboza una ligera sonrisa y sigue en su asunto.

Te dije, es duro de conquistar.

!!Que no lo estoy conquistando!!
Aunque es muy buena idea.

Soy toda una genio.

Por que eres parte de mi.

Sísí como digas.

Blake toma su café y camina a una mesa para sentarse.—¿Puedo sentarme contigo?—sonrío.—Es para conocernos mejor.—

Rueda los ojos y asiente.—de acuerdo, siéntate.—me siento frente a él y lo miro sonriente. Él voltea a ver a otro lado.

—¿Por qué me odias tanto?—lo miro fingiendo tristeza.

—No te odio.—dice seco.

—Pues pareciera.—digo bajando la cabeza. Él me mira confundido.—Yo creo que eres lindo.—lo miro con una sonrisa fingiendo estar apenada.

¿Ahora si puedo decir es duro de conquistar?

Sí, conciencia, sí puedes.

—¿Ah?—me mira confundido.

—Sí, te ves muy amigable y lindo.—sonrío más.

—Gracias supongo.—suelta una risa y bebe de su café.

—¿Tú que piensas de mi?—lo miro.

Eso fue algo directo.

Espero que sea igual de directo y que tampoco sea grosero.

—Creo que eres linda pero testaruda.—me mira con una ligera sonrisa.

Si, fue muy directo.

Ahora, conciencia, ¿nos vamos por el camino de atraparlo románticamente o por el de ganarnos su confianza?

Yo como tú fiel consejera te diría que fueras por el de la confianza porque a penas estás entablando una conversación con él y sería muy rápido y podría terminar en fracaso y...

Piensa más rápido conciencia

¿Por que?

—¿Crees que soy linda?—digo haciéndome la avergonzada e ignorando a mi conciencia.

—¿Por qué lo dudas?-sonríe.

El chico si que está desesperado ¿no?

Eso espero, lo usaré a mi favor.

—Por que me ignoraste muy feo.—digo con cara triste.

—No por hacerle caso a un amigo significa que no me gustes.—

Ah la madre, ya se prendió esta mierda.

¿Esto es raro no?

Sisi, esta muy desesperado por tener novia, yo creo que esto no es normal.

O a lo mejor simplemente le gusto y ya, así de fácil.

Lo dudo mucho.

Pues yo no.

Arrogante.

Ya cállate, conciencia.

—¿Por que dices que te gusto?—

—por que me gustas? Desde que te vi me gustaste, por eso te defendí.—

Yo creo que miente.

¿Por que lo crees?

¿Y si es una trampa?

No creo que sea tan inteligente