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► Chapter Forty One: No

NOTA: ¿Es mucho pedir que comenten? La verdad es que amo su comentarios, sus opiniones, suposiciones y todo sobre lo que piensan del cap y el fic en general. Es realmente apreciable que dejen algo pequeño abajo :3

Capítulo dedicado a:   @iarezez_3668  Por su comentario el capítulo pasado. Bearsos, hermosa :3

► Chapter Forty One: No

Alex POV:

" Hayle " Volteo a penas Derek me llama, y alzo una ceja cuando me entrega el papel rosado. " Es orgullo puro ver el cambio que logras en la escuela. Sin dudas tienes una gran personalidad y un increíble futúro, pero nada de eso te salva del castigo que se te asignó el día de Wesley "

" Claro " Murmuro y guardo el papel en mi bolso, ignorando por completo lo que sea que quería seguir platicando conmigo.

Llegar a castigo nunca fue algo que yo considerara: El fin del perfecto universo de invisibilidad que provocaba perfecto informe de personalidad, responsabilidad, y calificaciones.

Nah. Castigo es eso. Castigo.

Al terminar las clases avanzo con mucha pereza a la aburrida sala. Y paso ahí en medio de un estado de psicósis. Extrañamente siento a Liam llegar y posicionarse a dos mesas de la mía, mientras que Zayn me besa muy ruidosamente la mejilla, dejándose caer tres mesas al lado de Liam, y Louis me revuelve el cabello para correr lo más cercano posible de una chica que creo que se llama Sara.

Castigo es una de las cosas que odio de esta cárcel. Bueno, odio esta cárcel, pero esta parte de esa cárcel supera mi nivel de odio permitido a la cárcel.

En castigo no puedes dormir. Hacer tarea. Estudiar. Conversar. Besar. Abrasar. O escuchar música. Joder, ni si quiera puedes mirar mucho tiempo a la ventana.

" Lo ganan por no cumplir los reglamentos de la escuela " Se burla el hombre que ha ganado suficiente odio entre los profesores para que lo dejaran a cargo de nosotros.

Llueve al momento en que salimos del aula C-12. Y no sé cómo rayos irme sin que mi ropa se vuelva mi segunda piel.

" Jake me dejó el Audi " Murmura Zayn cuando estoy a menos de veinte centímetros de la lluvia, aún bajo el techo de concreto. " Puedo llevarte a casa " Asiento, y Zayn toma mi mano cuando corremos bajo la lluvia hasta el Audi.

" ¡Dios, qué horror! " Se queja cuando entramos. Miro confundida su acción de mirarse el cabello en el espejo. " ¡Mira mi cabello! ¡Se arruinó! ¡¿Cómo rompo corazones ahora, eh?! "

Me río. Pero no encuentro motivos reales para hacerlo. Me duele el estómago, de esa forma en la que sé que las cosas no estarán bien.

Cantamos bajo los efectos de Queen. Más que nada, nos reímos y repetimos muchas veces esa canción de la bicicleta.

" Llegamos " Dice él estacionando el auto frente a mi casa, con las balizas encendidas y la lluvia luchando contra el limpia parabrisas. " ¿Ocurre algo? "

" Tengo un severo mal presentimiento " Murmuro asustada. Es fuerte, me dolerá. Dolerá de esa forma en la que habrá una herida y costará mucho que sane.

Porque odio admitir que no habrá nadie que me ayude a sanarlas. Nadie si no es Camila, nadie si no es Zayn... Nadie

" Llámame si ocurre algo. Sabes que siempre puedo para ti, peque. " Me murmura con una sonrisa. Peque. Es el nuevo apodo que he adoptado de Zayn.

Asiento y me da un último abrazo antes de que yo corra dentro de casa. Tardo un poco en encontrar mis llaves, y cuando cierro logro ver a Zayn arrancar en su auto.