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► Chapter Forty Nine: Party

Feliz Navidad :) 

► Chapter Forty Nine: Party

Alex POV: 

Solo una hora y media después Liam está recibiendo gustoso las llaves del BMW de Zayn. Miro a Camila, quien luce una falda negra tubo ajustada, zapatos de plataforma y una camiseta algo suelta con algún esstampado en la parte posterior sonriendo. Ella sonríe, yo no. Tengo ese extraño preentimiento que no quiero ir a la fiesta, pero tampoco iré a casa. 

" ¿Alex? " Liam murmura contra mi oído y salto. Ni si quiera me he dado cuenta que se ha movido de su sitio y situado detrás de mí. " ¿Qué ocurre? Estás... ida " 

" Nada " Respondo encogiéndome de hombros y cruzando los brazos sobre mi pecho. Hace frío. El invierno está entrando fuerte, la fina lluvia blanca me dice que pronto será el tiempo de comprar mucho chocolate, y que empezará a hacer frío dentro de poco. Ahora más que nunca odio a la hermana de Zayn por convencerme de usar un vestido como el que llevo. Simple y de color crema, ajustado y con la falda en campana, junto con unos altos zapatos de tacón blanco y una trenza simple hacia un lado. Parezco monja en lugar de una adolescente que va a una fiesta. 

" ¿Estás segura? Sabes que podemos no ir a la fiesta. Podemos ir al mirador, ¿que dices? " Me pregunta pasando sus manos a mi cintura, su rostro acercándose lentamente. Sé lo que quiere, lo ha estado haciendo de esta forma las últimas dos semanas. Suaves preguntas, con voz melosa y se acerca despacio y dulce, apenas tocándome y engatusándome con sus dulces actos hasta que ¡ZAP! Nos estamos besando. 

" No, vamos a la fiesta. Podemos ir luego " Asiento intentando alejarme. No quiero nada realmente. Es ese estado en el que solo quieres estar solo, posiblemente arropado bajo la cama, escuchando la lluvia caer con una suave melodía de Ed Sheeran y alguien pegado a tu cintura, abrazándote. 

" ¿Segura? " Insiste, más serio y posiblemente aceptando el que estoy de una forma completamente bipolar.

" Segura " Afirmo y él asiente antes de darme un beso rápido y girarse a abrirme la puerta. Entro sonriendo, con las mejillas algo rojas y él cierra suavemente antes de ir por el otro lado y subir para arrancar tras el auto de Zayn. 

La noche será larga. 

(...)

Llegamos a eso de las doce a la casa donde se desarrolla la fiesta. Medio instituto se encuentra aquí, bailando o tomando hasta caerse, y yo simplemente quiero huir. 

El estruendoso estéreo de música hace que los vidrios se muevan, los adolescentes gritan y bailan, y desparraman sus babidas sobre otros sin importancia. Todos ríen y la pasan bien, de lo contrario, se comen a besos en las paredes. 

Liam me invita un par de bebidas. Lo veo que cuidadosamente mira el ponche del que todos sacan y sacan bebidas. Él decide que es mala idea tomar de él y va a la nevera como si fuera su casa para sacar dos botellas cerradas de cerveza. Lo agradezco con el alma. 

El alcohol el suave y me relaja un poco, pero no quiero tomar en exceso. La fiesta está muy fuera de control, y puedo ver a un chico que lanza una especie de hielo blanco dentro del ponche en dos ocaciones. 

Todos están drogados. 

Liam saluda y saluda a gente, mientras comparte con sus amigos, los cuales ignoro, y yo decido quedarme cerca de él -Literalmente, él me tiene por la cintura- y me concentro en cualquier cosa menos en lo que ocurre a mi alrededor. 

Estamos en un sillón hasta que son las una y media de la mañana. Sólo conversando y girando una botella para hacer preguntas idiotas. Nadie se da cuenta que nunca es nuestro turno porque nadie pone atención realmente a la botella. Me siento sofocada cuando una pareja comienza a besarse descontrolada junto a mí, y siento el aire cerrarse y las paredes pequeñas.