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Luego de hacerle los estudios a May el doctor le dio unas cuantas indicaciones mas y se regresaron a la casa, Mayte en todo el camino estuvo muy callada, en su cabeza se reprochaba el no haberse cuidado bien en este tiempo de su embarazo. Llegaron a casa y Carlos la ayudo a bajar del auto para luego entrar a la casa, ella sin decir nada se fue hasta el cuarto, al llegar a este se acosto con la mirada fija y comenzo a acariciar su vientre

-Todo estará bien mi vida -pensaba y acariciaba su vientre aun plano

Luego de un rato subió Carlos, al principio dejo a Mayte sola, el sabia perfectamente que a ella le gustaba estar sola cuando algo malo pasaba. Cuando llego al cuarto la vio acariciando su vientre, no lo dudo y se acerco a ella y se acostó con la cabeza en las piernas de May y comenzó a hablarle a su hijo

-Hola mi amor -le da un beso en el vientre -soy papá y quiero que sepas que te amo con todo mi corazón y que te esperamos con ansias, mamá es una guerrera y luchara por ti

Mayte al escuchar a Carlos comenzó a llorar, que bien se sentía el ver que su hombre le hablara a su hijo y le dijera que lucharian por él

-Eres muy fuerte, sigue así para que nazcas fuerte y sano, te estamos esperando aquí todos, tus tíos, tus primos y abuela -acaricia el vientre y luego sube y acaricia la mejilla de May -porque lloras mi amor

-Es emocionante, jamas pensé que seria mamá y ahora que estuve a punto de perderlo nuevamente mi corazón se paralizo, no quiero que vuelva a pasar eso, quiero que nuestro hijo nazca y seamos una familia -se toca el vientre

-lo seremos mi amor, seremos una familia feliz y nuestro bebé esta muy aferrado a ti -la besa, en aquel beso transmitía su amor, su apoyo y su protección

-Te amo bebé, amo formar una familia contigo y amor por sobre todo ser tu esposa -lo abrazo

A veces después de un tiempo con la pareja y convivir todo el tiempo las parejas caen en una rutina.

Mayte siempre había luchado contra eso y es que cuando las cosas comianzan a volverse repetitivas es una mala señal. Una advertencia de que algunas otras cosas podrían salir mal también.

-May! Te hice el desayuno- gritó Carlos desde la cocina

-Voy!- respondió sin tomar mucho en cuenta lo que pasaba

-Ya me voy a trabajar- dijo Carlos son una sonrisa besando su frente -Te amo

Mayte frunció el ceño y lo miro por un momento recordando -No me gusta la rutina- respondió

Carlos la miró confundido y asintió -A mi tampoco- se encogió de hombros

-Desde que sabemos que estoy embarazada preparas el desayuno, dices que te vas y besas mi frente- dijo Mayte sería

-Pensé que te gustaba- sonrió ligeramente

-Si me gusta pero no quiero que las cosas vayan mal- admitió sin perder de vista el plato como si fuera lo más importante del mundo

-No va a pasar nada amor, solo quiero consentirte- la abrazó

-Me da miedo- susurró

-Yo sé, y también tengo muchos miedos amor y no me voy de tu lado- la tomó de la barbilla -Te amo

-También te amo- sonrió con una lágrima queriendo escapar

-Entonces me dejas prepararte el desayuno?- sonrió

-Si- asintió -Pero si un día eso te molesta dímelo antes de que algo cambié

-Lo prometo- asintió con una mano en el pecho -Ahora, me voy a trabajar- besó su frente y se fue dejando a ambos con una sonrisa imposible de quitar

Luego de que Carlos se fuera a trabajar May se quedó en casa, vio la hora y era temprano así que subió a su cuarto y luego de meditar un rato se durmió. A las horas el sonido del celular la despertó, sin ganas de abrir los ojos contestó

-Bueno -dijo abriendo lentamente los ojos -suegra hola, como esta

-Hola preciosa, yo bien, como estas tu, como te has sentido

-Todo bien gracias a Dios, solo con mucho sueño -ríe - a que debo su llamado

-Solo para saber como estaban y comentarte que saldré de viaje y quiero que cuides de mi bebé -rie- ya sabes, es mi único hijo y me preocupa

-Suegra querida, yo lo cuido con mi vida, es el amor de mi vida y muero si le pasa algo, así que pierda cuidado y disfrute de su viaje

-Bueno mi May, te dejo, me saludas a Carlos y a tus hermanas. -colgó la llamada

Ya era tarde, Carlos debería de haber llegado hace una hora y no aparecía, se comenzó a preocupar, cuando se atrasaba o algo le pasaba siempre le avisaba, no quería pensar en algún accidente, sentía miedo, desde que quedo embarazada se sentía desconforme con su cuerpo y pensaba que Carlos tambien lo hacia, su mente comenzó a crear historias.

-Y si esta con alguien mas -pensaba

Decidió preparar la cena, cuando ya termino de cocinar tomo su celular y llamo a Carlos, estaba preocupada y un tanto psicociada, si realmente Carlos la estaba engañando, ella no podría soportarlo, no de nuevo.

-Bueno -contestó Carlos - hola nena, paso algo

-Donde estas Carlos -pregunto un tanto sería - te estoy esperando para cenar

-Estoy en una junta mi nena, no llegaré a cenar, pero tu come algo y acuestate, no me esperes despierta

-Carlos, te estamos esperando -le llamo una de las asistente

Mayte al escuchar la voz de aquella mujer sintió que su corazón se rompía, Carlos la estaba engañando y ella como tonta esperándolo en casa

-Disfruta de tu junta Carlos, y por favor no vuelvas a mi casa -dijo Mayte con lágrimas en los ojos y corto la llamada

-Que estúpida soy -pensaba- era obvio que Carlos buscaria a alguien mas si yo estoy gorda y fea

Todo cambióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora