"Love Between The Mafia" Ppg x Rrb ||+18||

Capitulo 15

Condado de California.

En cuánto llegaron a casa, Hibiki, Shou, y Shirou junto a su madre y a su tío no perdieron tiempo en contarle a su padre/esposo/hermano y a sus abuelos/suegros/padres lo que Blossom, Buttercup y Bubbles les dijeron lo que ellas debían hacer.

Al momento la reacción de Peter no se hizo esperar.

— ¿Cómo que ellas les dijeron que no intentaran buscarlas ni rescatarlas? ¿Y están manejando algo complicado por su cuenta? Esto suena grave, chicos. ¿Tienen alguna idea de qué podría estar pasando?

Hibiki, Shou y Shirou intercambiaron miradas preocupadas antes de que Hibiki respondiera:

— No tenemos detalles claros, papá. Parece que es algo muy personal para ellas. Nos pidieron confianza y tiempo.

Peter frunció el ceño, pensativo:

— Si ellas piden tiempo, debemos respetarlo. Pero estaré atento por si necesitamos intervenir. No me gusta dejarlas enfrentando algo peligroso solas.

Los demás asintieron en silencio, compartiendo la misma preocupación.

— Creen que en serio las niñas lleguen a enamorarse de ellos — quiso saber Estela preocupada por haber oído que sus nietas no querían ayuda.

— Lo dudo mucho abuela — contestó Hibiki serio — Blossom, Buttercup y Bubbles tuvieron una horrible decepción amorosa que las marcó de por vida, a tal grado que juraron no enamorarse jamás.

— Y ahora si es que lo hacen — siguió hablando Shou — Es probable que ellos... Por mucho que deteste decirlo, puedan ayudarlas a sanar esas heridas profundas en sus corazones.

— Y que también... — continuó Shirou — Puede que posiblemente ellas terminen amandolos, como ellos igual dicen amarlas y acepten quedarse con ellos, aunque no sería tan mal, que al menos las dejen hablar con nosotros.

— ¡¿Pero como se les ocurre decir eso?! — gritaron Malcolm, Richard y Peter abriendo los ojos como platos ante lo que ellos acababan de decir. — Eso no puede ser.

— A nosotros tampoco nos agrada la idea Peter — habló Marissa — Pero aún así ¿Serías capaz de arrebatarles la felicidad a las niñas? ¿Y hacer que los encierren en la cárcel dándoles cadena perpetua?

Esas preguntas sin duda dejaron callado a Peter, no sabía su respuesta, por una parte sus hijas estaban en peligro, en manos de esos sujetos que eran hijos de su más grande rival que fue su mejor amigo hace mucho tiempo, pero también se ponía a pensar en la felicidad de sus hijas.

Ellas habían sufrido mucho en el amor que por eso fué que él decidió convertirlas en agentes de la DEA, así podían olvidarse de eso y no mostrar sus sentimientos hacia nadie ya que los enemigos se podían aprovechar de eso, ellas al entrar a la academia, a excepción de cómo eran con la familia se volvieron muy frías, inexpresivas, distantes, no como eran antes tiernas, alegres, cariñosas, gentiles, amables, comprensivas, pero aún así eran sus hijas y quería lo mejor para ellas, también para sus hijos, pero ellos no habían experimentado lo mismo de ellas, lo cual fué una experiencia horrible para sus pequeñas.

Ahora con esto que acababa de suceder ya todo era confuso y sinceramente no sabía que sucedería con sus hijas estando en manos de los que ahora eran sus esposos, porque así era, sus hijas podían estar expuestas a ellos, tal vez podría soportar eso, pero lo que no podría soportar sería saber que sus hijas se convertirían en las líderes de la mafia rusa junto a sus yernos, por desgracia lo eran.

Peter no tardó en contestar la pregunta de su esposa.

— Marissa, entiendo tus preocupaciones y las comparto. Pero también tenemos que considerar lo que nuestras hijas realmente quieren. Ellas son adultas y tomarán sus propias decisiones, aunque eso signifique enfrentar riesgos que nos preocupen profundamente. No quiero perderlas, pero tampoco quiero interferir de manera que las haga infelices.