Sin duda el helado es el sabor más delicioso para algunas personas, en el caso de Hoseok su nuevo sabor favorito se encontraba en los labios de Yoongi.
— ¿Te han dicho que eres muy lindo Min Yoongi? — las dulces palabras que el castaño decía mientras miraba a su hyung con toda la atención del mundo podían llegar a ser demasiado cursis para el mas pálido.
– Cállate – sus gestos de niño pequeño enojado no podían reclamar ante la presencia del mas moreno ya que sus mejillas decían toda la verdad que Jung pudiera necesitar.
— ¿Te han dicho que el sabor del helado es igual que al de tus labios? —.
El mayor sintió un calor en todo su cuerpo al recordar aquel beso, empujó a su compañero haciendo que este cayera al suelo mientras reía a carcajadas pero con ternura, Min desvió la vista de Hoseok, el susodicho se levantó riendo mientras miraba a Min Yoongi ponerse más sonrojado de lo que ya estaba.
El timbre de regreso a clases sonó así que el menor se apresuró a dejar un beso sobre la mejilla del chico con menor estatura y correr hasta el salón de clases. Acabando las clases Hoseok fue hasta el salón de Yoongi a esperar a que saliera, una vez que salió, tomó con fuerza la mano de Min para que esté no tratara de soltarse en ningún momento, y así caminaron hasta alejarse de la escuela, en dirección a la casa de Yoongi
— ¿Has pensado lo que te dije?— preguntó el castaño haciendo que el más bajo frunciera el ceño confundido
— ¿Sobre qué? — desvió su vista del camino para poder prestarle atención al más alto.
— ¿Has pensado en aceptar ser mi novio? — sonrió mientras miraba al frente sintiendo la mirada de su hyung, quería parecer lo mas varonil que Yoongi pudiera ver de él pero eso era más que imposible; Min Yoongi veía a Jung con una perspectiva diferente a la que los demás tomaban al chico.
– No – respondió fríamente a pesar de que la noche anterior pensaba en nada que no fuera el estúpido y lindo chico que tenía a un lado de él.
– Bien, entonces no serás mi novio, buscaré otra manera de llamarlo — lo miró directamente; bajó su miraba hasta los labios de Yoongi, los cuales estaban con un poco de color y húmedos— ¿Te parece?
– Si— dijo inconscientemente. El verdadero Yoongi no seria decir aquello como si fuese algo de lo que quisiera estar de acuerdo.
— ¿Qué tal si te compro un helado antes de llegar a tu casa? –.
Yoongi no pudo evitar sonreír lo que lo obligo a acceder ir por el helado, ¿qué estaría bien? ¿uno de queso?, ¿de vainilla?, ¿de cereza?, ¿de mora azul?.
Pensó varios minutos Hoseok de camino a la heladería, compraron uno de vainilla para Hoseok, y de chocolate para Yoongi. Ambos decidieron comer el helado de regreso para poder disfrutar del sabor de este.
– ¿Porqué chocolate? –. Jung miró a su hyung de manera inocente mientras balanceaba sus manos las cuales estaban entrelazadas.
– Porque si – respondió mientas lamía el helado — ¿Por qué vainilla?— lo miró intrigado pero no dándole mucha importancia.
– Oh – sonrió dulcemente— pues es delicioso. – Porque ese es el sabor de tus labios Min Yoongi.
Pensó varios minutos en la pregunta que le había hecho su hyung, y sobre el pensamiento que tuvo enseguida, estaban por llegar a la casa del más bajo ambos inconscientemente disminuyeron el paso.
Hoseok no dejaba de mirar a Yoongi disfrutar de su helado, su mirada gatuna clavada en el helado, entre momentos clavada en sus manos, y en otros momentos en el cielo. Admiraba cada gesto que hacía el más bajo, le parecía demasiado tierno pero sensual al mismo momento.
– Tienes un poco de helado–. Hoseok sonrió al ver a Yoongi mancharse con un poco de helado sobre sus labios después de acabarlo. Claro era una buena excusa; aunque fuese muy directo.
– Eres un chismoso –.
– Enserio, hay helado sobre tus la...— sonrió sin terminar la palabra, era su momento de actuar.
– ¿Sobre? —.
– Yo lo limpiare por ti, toma mi helado–.
Yoongi tomo el helado mientras Hoseok sacaba un pañuelo de su mochila, y sonrió, acercándose a Yoongi este lo miraba de manera tierna ya que tenía su mirada perdida en él y en todo lo que hacía. Tomo a Yoongi del cuello y se acercó para limpiar sus labios con ayuda de los suyos del resto de helado que pudo a ver quedado sobre estos, haciendo que sus labios de ambos se volvieran a encontrar, se alejó un poco y paso el pañuelo sobre los labios del chico de tez pálida; se podría decir que el pañuelo era un pretexto para distraer al más bajo, relamió sus labios y sonrió.
– Listo, vayamos a tu casa –.
ESTÁS LEYENDO
My Little ICE CREAM | HOPEGA
Fanfiction-Deja de llamarme Ice Cream -Sabes que te dejare de decir así .... Hasta que seas mío - -No seré nada tuyo- gruñio Min -Si, si lo serás Las faltas de ortografía aún no han sido corregidas :3