¿En Dónde Comenzó Todo? (Antología completa)

8. Mi corazón destrozado

Susy era una niña alegre, llena de felicidad, y con una vibra bellísima, que hacía que todos se sintieran con la misma felicidad, ella era un ángel, sacado desde el mismísimo infierno.

Una locura, ¿cierto? Pero yo les contare la verdadera historia de esta niña, que pareciendo un ángel, coleccionaba corazones rotos. Su primera víctima, Ricardo.

Cuando ambos apenas tenían catorce años y estaban aprendiendo lo que era crecer fue que se conocieron.

Ricardo un niño con un lindo sentido del humor, trataba de llamar la atención de Susy, era una locura ella jamás se fijaría en él, pensó y por mala suerte se equivocaba, ella un día llego a él sonriendo como siempre, el corazón de Ricardo se aceleró con su presencia. Ese día para Ricardo fue el más hermoso, pasó el día entero riendo y contando chistes con la niña más linda de la escuela.

Sin embargo, para Susy se le presentaba la gran oportunidad.

Un año después

Ricardo se había enamorado perdidamente de ella y como no enamorarse de una criatura que sabe cómo jugar muy bien sus cartas. Que sabe manipular a cualquiera. A ella solo le interesaba algo, obtener su primer corazón y ¿Cómo lo conseguiría? Solo de una manera, enamorando a las personas para luego, destrozarlas.

Cuando estaba completamente segura de que él se había enamorado lo hizo sufrir de la peor manera, le gritó lo mucho que lo despreciaba desde el momento en que le había conocido, y por ultimo le restregó a un nuevo tipo.

Habiendo terminado, el corazón de Ricardo quedó destrozado y por más que lo intentó jamás logró recuperarse, lo único que le quedaba por hacer, era acabar con su sufrimiento.

Unos meses después de lo sucedido con Susy, decidió ir a la casa de la chica con lágrimas en los ojos y un cuchillo en la mano.

─ Termina con mi sufrimiento Susy. ─ le gritó desesperado con lágrimas en los ojos.

─ No puedo hacer eso, si quieres hacerlo debes hacerlo tú. Hazlo. ─ Ricardo no podía más con todo lo que estaba pasando, le dolía todo, entonces se arrodillo ante ella, tomo el cuchillo y lo colocó justo donde se encontraba su corazón, ella sonrió con malicia, era justo lo que necesitaba.

Estaba hecho, su primer corazón estaba roto y en sus manos. Lo único que encontraron de aquel chico fue su cuerpo con un agujero en el pecho, en donde se suponía debía estar el corazón.

Susy no paró ahí, siguió rompiendo corazones y coleccionándolos.

Se preguntaran, ¿Por qué sé todo esto? Y se los diré, yo fui una de sus tantas víctimas y para decir verdad, la última. Para ella, la última pieza de su rompecabezas. Después de quitarme la vida mi alma al igual que mi corazón no salieron de esta casa, quede encerrado en la casa de Susy, al parecer no solo coleccionaba corazones rotos, sino almas desesperadas también.

Antes de que me pierda les seguiré contado lo que Susy estaba planeando.

Susy, "la niña linda"... no era una niña linda y mejor dicho, ni siquiera era una niña. Ella era un demonio, y se propuso recolectar esos corazones (veinte para ser exactos) con un propósito, hacer nacer a sus crías, bebés demonios que desatarán el caos en toda la tierra.