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🔥~017:final~🔥

-¿Usted cuidó de ella a como se debe?,estoy seguro de que ella no es de esos vagos.-

-A como ella le contó, la cuidé cuando enfermó, le ofrecí cama para que durmiera cómodamente mientras yo dormía en un incómodo sofá para darle espacio, cuando se quedó sin ropa para vestir le ofrecí la mía.- Hablaba calmadamente,explicando.

-Con razón esos trapos feos.- Escuché a mi madre murmurarle a mi padre,me importó poco lo que dijeran y seguí prestando atención.

El juez no dijo nada,sólo se quedó en un silencio mientras todos esperábamos que dijera algo.

-Esto es un poco ridículo...- Me desconcertó un poco lo que dijo. -Vamos a arreglar esto de una vez,el caso es así: Su hija de veintiún años huyó con su novio sin avisarles,ustedes ni se preocupan,la encuentran luego de cuatro meses y ustedes deciden demandar al ser humano que se preocupó mas que ustedes por su hija. Es demasiado ridículo,ella ya es mayor por lo tanto...-

-¿¡Que esta tratando de decir!?.- Le cortó mi madre  gritándole.

-Baje la voz y si vuelve a interrumpir será sacada del lugar.- Ella bufó y se volvió a acomodar en su aciento. -Como estaba diciendo: Ella ya es mayor,por lo tanto ya debería de haber salido de ustedes,ella es libre de salir con quien quiera y desde ahora ella es libre,el joven Park sera libre sin ningún cargo a su favor y eh notado que ustedes no cuidan bien a su hija.- Le Habló a mis padres,mi madre estaba súper roja y mi padre serio como siempre. -Ella podrá vivir con el joven Park si es su decisión y aquí termina el caso.- Dio fuertemente con el martillo en la mesa,grité de felicidad. No podía creerlo. Jimin tenia una gran sonrisa en su cara,juro que vi una lágrima resbalar por sus ojos. -Gracias por estar presentes,pueden retirarse.-

Sin importar que,me levante de mi lugar y corrí hasta Jimin,este se levantó rápidamente e igual corrió hacia mi,al chocar nos dimos un abrazo,un abrazo de felicidad,que también decía cuanto nos extrañábamos. Él tomó con ambas manos mis mejillas y me besó con pasión. Al separarnos solo nos dedicamos una sonrisa,él se adelantó en besar mi frente.

-Bebé, te extrañé.- Llevó un mechón de mi cabello tras mi oreja y besó mis cachetes.

-Yo también te extrañé,oppa Jiminie.-

-Oye.- Frunció su ceño con una sonrisa. -Al fin me dices oppa.- Levanté mis hombros con una sonrisa. -¿Te irás conmigo?.- Asentí rápidamente feliz,él sonrió. -¿No querrás hablar con ellos antes?.- Él me volteó con sus manos en mis hombros,y ahí estaban ellos dos con sus semblantes serios. Miré a Jimin y él me sonrió señal de que me indicaba que tenia que ir donde ellos. Di uno pasos hasta acercarme a ellos.

-Madre, padre...-

Impresionantemente la mano de mi papá tocó mi hombro,yo la miré un poco sin entender y luego lo Miré a él.

-Lo hiciste,Jaemin. Eres impresionante.- Mis ojos se llenaron de lágrimas al apreciar por primera vez hace muchos años a mis padres sonreírme de forma sincera. -Venciste a tus padres,tenemos que ser justos con las reglas.- Aún los miraba sin formular palabra.

-Yo... lo siento.- Fue lo único que dije. Mi padre revolvió mi cabello.

-Al parecer ya llegó la hora de que partas a tu camino,harás tu vida,te casaras y tendrás hijos.- Habló mi padre. -... Nuestra única hija se marcha.-

-¿Por que... Se están comportando hací conmigo?.- Dije entre  sollozos.

-¿Y como se supone que debemos despedirnos de nuestra única  hija?.- Dijo ahora mi madre.

-Ahora para rematar tampoco tendrás el apellido.- Mi padre miró tras de mi donde se encontraba Jimin,giré mi cuerpo para verlo y sólo nos miraba con sus labios apretados y sus cejas un poco fruncidas.

-Bueno,creo que ya mucho. Ganaste legal,Jae. No te olvides que tienes padre y madre.- Por último despidiéndose de mi,me abrazaron y me dieron un beso en la frente,no tuve reacción ante ellos sólo los miraba,por último me dieron una sonrisa y comenzaron a caminar en dirección contraria a la mía.

Parpadee un par de veces entrando en la realidad de que esos fueron de verdad mis padres y no fue sólo mi imaginación.

-¡Mamá, papá!.- Ellos se giraron en cuanto los llamé. -¡Los quiero!.- Y por último me sonrieron siguiendo su camino. Tenia lágrimas en los ojos,acepto que los odiaba y todo,pero,joder,esto es de verdad una despedida,oficialmente me estoy alejando de ellos.

Sentí unas manos en mis hombros,unos labios tocar mis mejillas seguido una voz hablarme al oído.

-Adiós,suegros.- Susurró Jimin como si se estuviera despidiendo de ellos. Lo mire con una sonrisa. -¿Nos vamos?.- Preguntó.

-Sí.- Respondí.

-¿A casa?.- Otra pregunta.

-Sí.- Volví a responder.

-¿A jugar?.- Dijo esta vez con una sonrisa picara.

-Sí... Espera,¡no!.- Negué rápidamente.

-Ya respondiste que sí.- Habló él. Comenzamos a caminar.

-No era lo que quería responder.-

-¿A no?,¿Acaso no quieres jugar a las cartas conmigo?.-

-¿Sabes que?,silencio y vámonos.- Le golpeé el hombro amistosamente.

-Oye,Abusas de mi.- Discutíamos mientras Caminábamos a casa.

-Eres muy llorón para mis bromas.-

-Claro que no.-

Tengo que decir que malditamente estoy feliz y agradecida. No me imaginaba que Jimin fuera a prisión,mientras yo me encierro en una habitación estando en depresión por él,pero aquí estamos,uno al lado del otro,disfrutando de la dulce compañía que nos damos,los cumplidos y pensamientos mutuos que nos decimos.

Somos una empalagosa pareja hablando de cualquier estupidez en la calle,sin importar que las personas nos miren raro,eramos felices y somos felices,hasta apuesto que seremos felices.

No jodas,soy muy cursi para esta mierda de sentimientos y es que nunca en mi vida estuve con un chico con el permiso de mis padres,ahora que lo recuerdo ellos ya no están detrás de mí. Okay eso es pasarse ya.

Dejando las bromas,Extrañaré a los ridículos padres estrictos y manipuladores,diré, que algún día tuve. Soy libre,puedo hacer cualquier cosa que quiera.

Si quiero salgo embarazada,bien,eso ya no,ya no haré bromas así.

Jimin tomó mi mano entrelazando los dedos,me sonrió y besó las manos juntas.

-Lo que siempre soñé.- Dijo,Le Sonreí.

-¿Siempre lo soñaste?.- Pregunté con una ceja alzada.

-Sí,¿sabes que otra cosa sueño?.- Negué. -Que me digas oppa.-

-Ya te dije oppa.- Le aclaré.

-Si,pero quiero que me lo digas ahora.- Dijo aparentando sus ojos en una sonrisa apretada.

-Claro que no.- Dije con una pizca de vergüenza.

-Anda,dilo.- Negué. -¿No?,bien.- El dedo de su mano libre se dirigió a mi labio inferior. -Soy tu bebé, oppa Jimin.- Simuló que era yo la que hablaba moviendo mi labio y usando su voz chillona.

-Yo no hablo así.-

-Claro que sí.-

-Claro que no.-

-Claro que si,aceptalo,también acepta que soy tu oppa.-

-Bien,¡lo acepto!.- Y sólo me sonrió para darme un sonoro beso en la mejilla.