Negociador

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Andrea le envía un archivo a Samuel por su celular.

Andrea: esta es la propuesta que hice, te espero mañana en mi despacho a las 9 de la mañana. Que descanses.

Samuel: waoo, esto es muy bueno...de hecho se parece mucho a lo que hice y ¿qué tal que le hizo solamente ajustes a la propuesta que le envié?

Flavio que estaba escuchando a su hermano solo giro la cabeza, Samuel era muy bueno en las áreas de finanzas, la escuela se le daba bien, estaba acostumbrado a recibir felicitaciones por su desempeño

Flavio: en el archivo puedes ver a qué hora terminó ese trabajo, ya deja de ser fanfarrón, reconoce que es muy buena en esa área.

Samuel: mmm termino este archivo antes de que yo le entregara mi propuesta. Tal vez la hizo con mayor tiempo del que me dió. Pero sí su propuesta está mejor estructurada que la mía

Flavio: Es buena y punto.

Samuel: yo también soy bueno y puedo serlo más que ella, si tan solo tuviera las oportunidades que ella tiene.

La actitud de Samuel sorprendió a Flavio, normalmente el no era envidioso.

Flavio: ¿qué te pasa?, normalmente el que se queja de nuestra situación económica soy yo y no tú. Acaso estás celoso de que las del junco tienen una mejor posición socioeconómica que nosotros.

Samuel: no es eso, me pesa no poder terminar la escuela y trabajar en lo que estudié.

Flavio: tranquilo hermano, ya estás por lograrlo pero cuando lo hagas todo dependerá de tí. Me sorprendes sabes, nunca te había visto así.

Samuel: nunca había tenido tantas ganas de superarme. Mejor me voy a descansar

Flavio: vaya, vaya, será que no logras sorprender a Andrea del Junco y eso es lo que de verdad te frustra.

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Andrea: porque tienes a esos empleados trabajando aquí?

Beatriz: se han portado muy bien conmigo, me han hecho compañía

Andrea: pero son groseros con los demás empleados

Beatriz: es posible que tengas razón, daré indicaciones que no vuelvan a molestarte y estaré más al pendiente de lo que hacen.

Verónica aún no se había ido.

Verónica: yo creo que es momento de que yo me vaya

Beatriz: de ninguna manera, no te lo permitiré, ya es tarde, te quedas aquí y mañana temprano te vas. Además me gustaría que me visitaras con mayor frecuencia.

Beatriz: ¿cómo está eso de que casi no duermes Andreíta?

Andrea: me han surgido las ganas de componer de nuevo

Verónica: es enserio? me alegra que lo hayas hecho, entonces hay un amor a la vista. No me digas que es uno de esos chicos

Andrea: nooooooo

Verónica: eso no te lo creo, es que acaso no los has visto

Beatriz: de que son divinos, lo son, ¿cómo es que no te has percatado Andreita?

Andrea: yo no estoy enamorada de ninguno de ellos.

Beatriz: y quien sí entonces?

Verónica: dínoslo

Andrea: no puedo decir nada, no estoy segura

Verónica: con eso que acabas de decir lo has dicho casi todo, es una de tus hermanas ¿no es cierto?

Directo al corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora