Adira pasó todo el día recibiendo felicitaciones de todos los que la rodeaban, incluso las hienas mostraron un comportamiento respetuoso, aclarando que la alianza aún seguiría durante el reinado de Adira.
La celebración terminó y todos ya se encontraban dormidos, todos menos Adira.
Su cuerpo se movía de un lado a otro en el rincón de tierra elevado donde dormía, un lugar reservado solo para el rey y la reina.
Intento dormir pero se sentía muy inquieta. Tenía demasiados pensamientos en la cabeza que no le permitían descansar.
Comenzó a pensar en el día siguiente. En cómo ahora dirigiría el reino. Siempre había tenido confianza pero por alguna razón miles de dudas comenzaron a inundarla.
¿Seré buena reina? ¿Sabré dirigir ahora sin mi abuelo? ¿Y si me acobardo en mi primer reto? Peor aún, ¿y si pierdo? Podría perderlo todo. Mi honor quedaría desecho. ¿Y si no me caso nunca? ¿ Los animales aún se sentirían seguros solo conmigo?
Abrió los ojos siendo incapaz de seguir soportando el sucio juego de su mente. Temía que sus bruscos movimientos fueran a despertar a alguien, y lo que menos quería era alertar a la manada. Miró a su alrededor para asegurarse de que todos estuvieran dormidos.
Tenía que salir de ahí, tal vez un poco de aire fresco la calmaría un poco. Se levantó y comenzó a caminar esquivando a los leones dormidos para poder salir.
Tafari dormía tranquilamente cuando despertó al sintir una presión sobre su cola.
Levantó la vista y vio a una Adira apresurada saliendo de la cueva. ¿Estará bien? Se preguntó alzando una ceja.
Adira se dirigió a la punta de la Roca.
—¿Qué me pasa? Por favor, Adira. Tienes que calmarte—Se dijo a sí misma—No llevas ni 24 hrs. con tu título y ya estás... pensado cualquier babosada—se regañó.
Un par de minutos Tafari salió de la cueva y camino hacia la leona.
Sin darse cuenta Adira seguía su charla—Vamos, piensa. ¿Qué diría el abuelo? Él diría que está orgulloso de mi.
Papá diría que debo confiar en mi misma—caminaba de un lado a otro.—Makini diría metáforas confusas. ¿Qué diría tu hermano? Nah, Jay diría algo interesantemente inútil. Algo como, " El 95% de la población adulta ha tenido algún episodio de insomnio en su vida, por lo tanto estadísticamente lo tuyo es algo normal, Adira"—imitó.
—¡Ya se! ¿Qué diría la tía Vitani?—hablo un poco más alto—"¡Contrólate guerrera, deja de ser débil!"—dijo golpeando el piso con su pata.
—Es un gran consejo—dijo una voz por detrás.
Adira volteo asustada.
—¡Tafari! Ehhh, eres tú—hablo nerviosa—¿Tu también te... te levantas a media noche?
—No, piso mi cola al salir.
—Oh, lo siento—dijo avergonzada.
De pronto Tafari soltó una pequeña risa—¿Quién la asustó?
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El Rey León: La Reina Adira
FanfictionContinuación de "El Rey León 4" La noticia de que la joven princesa heredera esta lista para convertirse en la nueva reina ha llegado a oídos de otros leones. Sus decisiones ahora podrán marcar el futuro de su hogar y el destino de dos leones en pa...