Chico Ruidoso > Changlix

~15~

— SHOOT! I'M LATE!

Los dos chicos habían quedado en que se iban a ver a las dos de la tarde para poder ir al parque de diversiones. Por como pueden leer, a Felix se le hizo tarde debido a que la hora de su celular estaba desconfigurada con una hora de retraso, no fue hasta que el chico vio la hora desde la televisión y se dio cuenta de que si no se apuraba llegaría tarde.

Por otra parte, Changbin apenas estaba llegando al parque 'Aussie World', esperando a encontrarse con Felix. Estaba a lado de un juego de pelotas para niños en la espera de su vecino, y como siempre, estaba vestido de negro, chaqueta de cuero, pantalones y zapatos eran de este mismo tono, a excepción de la camiseta que llevaba debajo de la chaqueta, esa era de color blanco porque le quería dar algo de color a su vida (ah, se crean, sus camisetas oscuras las llevó a la lavandería).

Revisó la hora. Dos con quince. Antes de que pueda hacer cualquier otra cosa, escuchó un grito proveniente de una de las entradas del lugar.

— CHANGBIN~!

Dirigió su mirada hacia Felix, se le veía agitado, con el cabello revuelto y sus pecas, una vez más, sonrojadas, con la diferencia de que esta vez era de andar rápido en su bicicleta.

— ¿Qué te pasa, por qué gritas? Estoy a cinco metros de ti, no estoy sordo.

— Sorry, llego tarde — dijo Lee con una sonrisa apenada y rascándose la cabeza con su mano derecha.

El contrario sólo se dedicó a girar los ojos y dar una media vuelta para dirigirse a los juegos del parque. Felix, al notar esto, se reincorpora y le sigue el paso a Bin.

¡Oh, miren, la cosa 'favorita' de Lee! = silencio; ninguno de los dos hablaba, qué novedad. Cada que estaban juntos siempre había un silencio que se ocasionaba entre ellos dos, sin embargo, Bin empezó a hablar; hace unos días se dio cuenta de que al chico ruidoso no era muy fan de situaciones calladas: «debería de hablar un poco más».

— Ya' know? Si estuvieramos en Corea, no me podrías llamar sólo 'Changbin'.

— ¿Eh, por qué?

El coreano empezó una conversación con el australiano en referencia a hace unos momento que le llamó 'Changbin'; explicándole que en donde nació, las personas se dirigen a la gente de forma respetuosa al usar palabras como 형 [hyung], 언니 [unnie], 누나 [noona], 동생 [dongsaeng], entre otros. Hablaron del mismo tema durante veinte minutos, paseando alrededor del parque y comprando una que otra cosa que se encontraban ahí.

— Oh~! ¿Entonces tu eres mi oppa?

— What? No, 'oppa' lo usan las chicas para referirse a un chico mayor que ellas.

— ¿Y qué tiene que lo diga yo?

— La diferencia es que tu eres un chico, Felix.

— Cierto, tienes razón... dongsaeng.

— ¡No, no soy tu dongsaeng!

— Then?

— Soy tu hyung.

— Ah, ya entendí, Changbin hyong!

— Olvídalo, sólo llámame 'Changbin' y ya-

— ¡Mira, algodón de azúcar!

«¿en serio es este el chico que no me dejaba dormir ayer?» SC.

Bin solo deja salir un suspiro, su vecino era una persona con mucha energía, y el que esté comiendo cosas dulces sólo hacía que tuviese más ganas de saltar de aquí para allá. Aunque, Seo admite, que él es tierno. Muy tierno, como mil veces más tierno que un panda bebé. Más lindo que un cachorro y con una sonrisa más sincera y hermosa que el de las modelos que aparecen en los anuncios. Con unas pecas que parecían ser una galaxia en su cara. Unos ojos acaramelados. Su cabello castaño y travieso realmente suave a su punto de vista. Y también las palabras en las que se expresa y su manera de poner a todos de buen humor con su sola presencia. Con su buena menera de-