5.

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"Querido Lauti.

¿Hice algo malo?

No puedo dejar de verte, me arde el corazón cuando te veo. Es como... Una droga, un vicio el cual me esta matando muy lentamente. Terminara con mi vida dentro de poco.

Tu sonrisa tan radiante que destaca del resto, es como una estrella, el sol para ser exactos. Tus ojos con ese brillo, que hacen que me derrita cuando se posan en mi ser.

Ya se, sueno como si estuviera loca. Capaz lo estoy y no me di ni cuenta...

En fin ¿Qué puedo decirte? Tal vez que siento que me va a dar un infarto cada vez que te veo. Tal vez que cuando sonreís creas una alegría tremenda en mi vida.

Creo que ahora la palabra amor no es la que busco para describir lo que siento, es algo mucho mayor...

-Anónima."

Lautaro y Lichi estaban escondidos en el salón esperando alguna señal. Sin embargo, ninguna chica se acercaba al banco de Vera.

-Man, estamos acá hace más de 1 hora y no paso nada- Reclamo Lichi. Él sabia a la perfección lo que estaba pasando, le había dicho a Julieta unos minutos antes que no se acerque para que no descubrieran quien era.

-Esperemos un poco más, tal ve...- No pudo continuar, la campana, anunciando el inicio de su siguiente clase, hizo que los dos se resignaran.

A lo lejos estaba la chica, dueña de las cartas, esperando a que ambos se fueran para entrar a clases y con cuidado dejar la carta en la mochila de Vera, claro que con ayuda de su mejor amigo.

Lautaro entra a el salón y se sentó en su asiento, esperando que la clase comenzara, mientras que la chica escuchaba con atención lo que decía el pelinegro.

-Tal vez tendría que comunicarme con ella...- Murmuro.

-¿Por qué no le dejas una nota encima de tu banco antes de irte? Tal vez la encuentre y te responda- Respondió la pelirroja, provocando que Lautaro se de vuelta al instante.

Haciendo que la chica se sonrojara y ocultara su rostro atrás de su libro- Perdón, no pude evitar escuchar su charla...-

Lichi miro a su amiga, estaba muy sorprendido, pero al instante tuvo una idea- Ah, cierto. Lauti ella es mi mejor amiga Julieta, Julieta él es Lautaro.-

Si las miradas mataran Lichi ya estaría tres metros bajo tierra. Con mucha vergüenza la chica bajo el libro, mirando a Vera.

-Un gusto- Extendió su mano en forma de saludo.

-¿Sos nueva?- Pregunto Lauti.

La chica se sorprendio por lo que dijo el morocho, sintio una parte de su corazón romperse y con una voz quebrada respondió- Creo que estuvimos juntos desde la primaria...-

La clase comenzó justo en ese momento, sin embargo, en todo el día Julieta estuvo pensando si haberle hablado fue lo correcto.

-Ni siquiera sabe quien soy...- Susurro.




Querido Lauti-Lauti VeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora