Maiggie Shippers

Deuz

Un fuerte portazo rompió el silencio en el hogar de los nightmares. Inmediatamente Onnie dejo de jugar con su teléfono y Oxy se asomó por el umbral de la cocina hacia la puerta principal. Ambos observaron a un irritado Deuz dando grandes zancadas directo a su habitación mientras maldecía por lo bajo, dando otro portazo antes de gritar un gran "¡DEMONIOS!" cargado de frustración.

Después de un minuto de silencio observando la puerta por la que había entrado su amigo, intercambiaron miradas cómplices al saber que era lo que había sucedido.

- Otra vez...- pensaron mutuamente antes de romper el contacto visual.

Onnie soltó una pequeña risa burlona mientras Oxy bufaba con fastidio, después de todo, era el turno del pelinaranja tratar con el moreno antes de que pague su irá con todos en la casa.

-Suerte~

-Pudrete.

Con un suspiro desganado, espero a que todo el escándalo que estaba provocando el moreno se apaciguara antes de abrir la puerta. No se sorprendió al ver todo el caos que había en la habitación, ni mucho menos encontrar a su líder tirado boca abajo en su cama con los audífonos a alto volumen.
Se apoyo en la pared junto a la puerta, con los brazos cruzados ante el infantil comportamiento de su jefe.

Bien, podía tantear el terreno, preguntarle con delicadeza y tratar de que todo sea lo más tranquilo posible para minimizar el mal humor del Moreno, pero no. El era Oxy, no una maldita consejera escolar. Y ese no era un chico cualquiera. Era Deuz, su líder. La persona más terca y orgullosa que jamás ha conocido.

Por eso, mando al carajo todos los consejos que alguna vez le dieron en clase de solidaridad (aunque nunca les presto atención) y fue al grano.

-Otra vez estas llorando por esa chica- confirmo que había acertado por la forma en que Deuz se sentó de golpe, mirándole con indignación (desconectando los audífonos en el proceso)- Ya rindete, das pena ajena.

-¿¡Como te atreves!?, ¡Esto no tiene nada que ver con ella!- grito con el ego herido.

-Tiene novio, jefe. Ya lo a humillado bastante- claro y directo, pero aún así Deuz no dio su brazo a torcer.

- Me importa un bledo que el chico tomate sea su novio, ¡La recuperaré!- grito dándole la espalda mientras su amigo rodaba los ojos- en serio Oxy, estas empezando a sonar como Maggie, tan cortante y apático. Que...- un momento

Algo en sus palabras... no estaba bien, era... la ausencia de algo importante dentro de ellas, normalmente era Maggie la que le recordaba todos los eventos importantes, cosas por hacer o los ensayos. Le resultó extraño no recibir un zape en la nuca como recordatorio de su parte y...aguarda.

-¿Donde esta Maggie?- salió de sus labios de forma automática al notar la ausencia de la baterista.

Oxy pareció divertido con esa reacción ya que Deuz últimamente estaba más en su mundo que con ellos. Así que prefirió divertirse un poco más con el moreno.

-¿No lo recuerda jefe?, Ella se salió de la banda.

Nunca había visto a Deuz tan pálido.