Ataque y defensa

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El propósito de la enorme casa que Izuku había mandado hacer para Katsuki quedó claro una vez se instaló en ella, cada vez que Izuku, Kirishima y Kaminari tenían tiempo, iban a visitarlo, Denki por su parte había tenido la osadía de llevar su propio futón y reclamar una de las habitaciones como suya, hasta la fecha nunca se habían quedado a pasar la noche con él, pero Katsuki sabía que solo era cuestión de tiempo antes de que invadieran por completo su nuevo hogar.

En su nueva vida lo único que Katsuki hacia era vigilar unas cuantas cabezas de ganado, no eran ni siquiera una docena, fácilmente se hacía cargo de su alimentación y cuidados, como un extra le hacía arreglos al viejo establo en donde los animales se quedarían a resguardo durante las temporadas de frío y lluvia.

Katsuki jamás sabría que ese diminuto rincón había sido expresamente hecho para él, Izuku no quería que Katsuki se quedara aislado para siempre, tenía la esperanza de que quisiera integrarse a la sociedades nuevamente, pero no lo presionaria, le permitiría a su corazón sanar al ritmo que lo necesitara.

Mientras tanto, Izuku en su hogar se preparaba para una audiencia importante, Todoroki Enji acudiría a su hogar para hablar con Toshinori, Izuku desconocía de que hablarían, pero al ser una persona tan importante merecía un gran recibimiento, era una pena, desde hace tiempo se encontraba preocupado por Katsuki y quería ir a verlo lo antes posible.

Aunque el aspecto de Katsuki había mejorado bastante, gracias a la buena comida y a los cuidados constantes aún había algo que inquietaba a Izuku y era que las ojeras en el rostro de Kacchan, lejos de ir desapareciendo, parecían asentuarse cada día más y eso le preocupaba, de no ser por la visita que tendrían ese día, seguramente pasaría todo su tiempo con Kacchan.

-¡Estoy en casa!-La voz de Uraraka se escuchó desde la entrada, por las ocupaciones de Izuku había sido ella la encargada de llevar los víveres semanales a Katsuki.

-Bienvenida Uraraka-san ¿Cómo te fue? ¿Como está Kacchan?-.

-Nada que reportar, mismo carácter y malos modales-Con un suspiro de cansancio Uraraka dio su reporte, ella ya estaba acostumbrada al tosco carácter de Katsuki, en cierta ocasión ella fue la encargada de llevarle el desayuno, creyendo que Katsuki se sentiría mal comiendo solo llevo más comida de la necesaria y su propio plato, pero nada más sentarse a la mesa Katsuki le dijo:

-¡¿Que mierda crees que haces, cara redonda!? ¡Fuera de aquí, no voy a compartir mi comida!-Ofendida Uraraka se retiró de ahí, eso sí, llevándose una generosa porción del desayuno de Katsuki, ignorando las protestas de este último.

Izuku sonrió al escucharla, acostumbrado también al habitual carácter de Katsuki.

Por desgracia para Izuku el tiempo de ocio termino prontamente, la comitiva de Todoroki Enji se anunciaba ruidosamente en la entrada.

-¿¡Tan pronto!?-Izuku se sobresalto-Uraraka-san lo lamento, se que acabas de llegar pero ¿Podrías ayudarme aquí?-Pidio Izuku avergonzado, Uraraka asintió amablemente y ambos fue rumbo a la cocina.

Le sirvieron a Enji y a su hijo un gran banquete en el cual aprovecharían para conversar o por lo menos Toshinori lo intentaría, Enji no era del tipo hablador.

Ya en el banquete, Izuku tomo su lugar junto a Yagi mientras que Enji y sus acompañantes tomaron asiento frente a ellos.

-Paso un tiempo ¿No es así Enji-san? ¿Cómo está su fami...?-.

-¿Dónde está el chico que acogiste en tu hogar? Su nombre es Katsuki ¿No es así, Inasa?-Dijo Enji volteando a ver a Inasa quien solo asintió.

La expresión de Izuku cambio a una de total desconcierto, pero antes de poder decir algo Yagi hablo por él.

Gladiador (Katsudeku) [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora