Tras seis meses, nuestra protagonista Evelyn, comienza a acostumbrarse a su nuevo mundo, pero es incapaz de dejar atrás la tierra, los recuerdos de sus seres queridos prevalecen ante todo, se siente tan débil en este nuevo mundo...
Varias preguntas...
(Sí, lo sé, llevo prácticamente 2 años sin actualizar...lo siento =¬.¬=
Pero bueno estos últimos días he sido bendecida por la gracia divina...de nuevo, lo siento muchísimo y espero que lo disfrutéis).
Casi de manera automática y sin poder evitarlo, los pies de la chica se mueven solos, y en pocos segundos, se encuentra subiendo las escaleras de la sala de las puertas de manera imperceptible, como buena sombra, movida por la curiosidad y decidida a saber que pasa realmente en la biblioteca.
Al llegar observa como la puerta se encuentra encajada, con solo un pequeño espacio de margen.
Apoya su cuerpo en la pared y respira profundo.
- Dios...¡¿PERO QUÉ ESTOY HACIENDO?! -grita en su interior, consciente de que lo que tiene intención de hacer, no es lo correcto- no debería estar espiando...¡esto esta fatal!...sin embargo...
- ¡AHH! -este último suena más bien como un quejido, resuena con más fuerza y hace que la voluntad de la chica fracase-.
Al final, la curiosidad, mata al gato, y Evelyn no puede evitar dejarse llevar por sus impulsos, colocándose de manera ágil y discreta en el hueco de la puerta.
Quedando completamente pasmada de lo que sus ojos están viendo en este preciso momento...
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( 1...2...3...¡DERRAME!¡DERRAME NASAL!, ¡¿A QUÉ ESTO NO OS LO ESPERABAIS, VERDAD?! 7w7 ¡EMPEZAMOS FUERTE!).
( Por cierto, no pienso tolerar ningún comentario homófobo, aviso ¬¬ ).
Es tal su asombro que a la chica le resulta imposible aguantar un pequeño grito de exclamación, si no fuera por que una mano tapa su boca en este preciso instante, haciéndola retroceder hasta chocar con un cuerpo.
Por impulso y miedo, tiene la intención de dar un fuerte codazo en el estómago a aquel extraño, pero este a sabiendas de sus intenciones, la agarra y para su ataque, dejándola completamente inmovilizada.
- Nunca imagine que pudieras llegar a ser tan curiosa...y tan pervertida... -resuena en su oído como susurro, una voz inconfundible, acompañado de una pícara risita-.
La chica exhala pesadamente al fin con tranquilidad al descubrir que se trata de Nevra, sin embargo, no es capaz de ignorar la cercanía de ambos cuerpos, como su espalda roza con la musculera del chico y su aliento choca en su oreja, sin olvidar que la tiene completamente atrapada, y no puede evitar sentir excitación de manera involuntaria.
Cuando al fin la suelta, y antes de que la faelliene si quiera pudiera abrir la boca, su líder le hace un gesto de silencio, y le ordena que le siga, ya que obviamente no es el mejor lugar para hablar de lo que esta ocurriendo en la biblioteca.
Ambos bajan las escaleras, y se dirigen hacía las mazmorras.
La chica hace todo el camino en un incómodo y impaciente silencio, deseando de preguntarle al vampiro, ya que este aparenta total impasibilidad y parece que ya estaba al tanto de lo que acaban de ver sus ojos...por lo que deduce que no es la primera vez que Kero y Ezarel tienen este tipo de encuentros...íntimos.
