El Juego De La Manipulación

5. El no me manipula

PAMELA

Al llegar a la academia de baile se me hizo imposible no tener una discusión con Alyzz, me molesto que me dijera que tuvo cosas más importantes que hacer ya que su boda es en menos de unas semanas, me dijo que me mando un mensaje explicando me que no iba a asistir, el cual nunca me llego.

Estoy tan molesta con ella, así que decidí alejarme no obstante me sigue hablando pero ya no la trato igual, y lo que más me molesta es que me lo advirtieron, Steven me lo dijo que no perdiera mi tiempo con personas como ella pero no, aveces uno se tiene que golpear contra la pared para darse cuenta de ciertas cosas.

Esta semana a sido muy cansada para mi ya que la semana la empecé con el pies izquierdo, primero la discusión que tuve con Alyzz y luego, la que tuve con mi hermana ya que mi madre al parecer se encuentra muy enferma, al principio cuando hable con Sabrina tuvimos una fuerte discusión, pero después me entro un remordimiento horrible ya que, por más que yo diga que puedo odiar a mi madre, en realidad la quiero mucho.

Hací que al llegar a casa estaba en la sala preguntando le a Sabrina como seguía mi madre ya al parecer lleva días con fuertes dolores estomacales y no saben que es lo que los produce.

Al llegar Steven a casa y le conté toda la conversación que había tenido con Sabrina.

Y solo se sentó y me dijo con su ceño muy fruncido.

-Si tu madre no se encontrara enferma, ¿te hubieran llamado?- Yo solo lo observo y luego niego con la cabeza, mi familia es muy orgullosa para que después de la pelea que tuve con mi madre me volvieran a llamar a no ser por una emergencia como es ahora.

-Ahora que te necesitan ¿si te buscan?, Pamela. Pero mientras has vivido aquí seguramente no te han escrito ni para saber como te trato yo, o quizás si has comido, o quien sabe si yo te hubiera hecho algo malo ya llevas viviendo conmigo mas de un mes y a ellas no le importó si estabas bien, y ahora que tu madre se encuentra mal ¿si te necesitan? lo siento, pero con su forma de ser no estoy de acuerdo, mientras ellas son felices tu no existe, pero si ocurre una emergencia hay si existes Pamela.- No digo nada, solo me quedo callada, lo que el me dice es muy cierto y tiene mucha coherencia desde que estoy aquí, solo mi madre me llamo al día siguiente que no regrese a casa y luego de nuestra discus me volvió a llamar más.

En ese momento mi teléfono vibre.

Sabrina: Ya se encuentra mejor, ha preguntado mucho por ti, dice que quiere verte.

Todas las palabras de Steven resuenan en mi cabeza y hace que vea las cosas con otra perspectiva.

Pamela: Cuando pueda iré.

Al parecer no le importa mucho mi mensaje por que ni lo respondió.

Paso una semana y nunca fui a visitar a mi madre solo, sentía que si iba terminaríamos peleando.

Y me sorprendió, que me llamara.

-Hola.- Digo un poco desanimada ya que en realidad no quiero hablar con nadie de mi familia.

-Pamela, hija hace dos días, me dieron de alta y nunca viniste a visitarme, ¿te encuentras bien hija?-Su pregunta me llena de indignación.

-¿Ahora si te importo madre?, ahora si llamas para saber como estoy, ahora si te sirvo para algo.-Se me hace imposible contener las lágrimas, y empiezan a deslizarse por todo mi rostro sin control.

-Por Dios, Pamela como eres capaz de decir eso, si siempre te brinde mi apoyo, lo siento por no apoyarte en esa locutora que hiciste de irte de la casa, cuando siempre le pido a cualquier ser divino que exista que te proteja y te lleve por el bien, tu no sabes el verdadero sufrimiento que tengo desde que te fuiste, para ti es muy fácil ver todo a tu perspectiva sin saber en realidad los sentimientos de los demás.