Kinktober StrangeIron

Día 27 - Sex pollen

Stephen había olvidado aquel obsequio que le dio Loki tiempo atrás. Solo lo recordó cuando vio el frasco abierto en manos de un acalorado Tony Stark.

—Bienvenida la maratón de sexo— dijo cansado.

Había llegado de una batalla en otra dimensión con diferentes seres. Sus energías físicas y mágicas estaban por los suelos, pero la mirada de Tony era clara, no había forma humana que lo parase.

—¿Tal vez con un hechizo?— pero al recordar que el frasco se lo dio Loki, descarto aquella opción.

El castaño se lanzó directamente sobre el más alto. Enredo sus piernas en la cadera del otro y empezó a besarlo de manera desesperada, Strange estaba bajando sus defensas cuando la voz de la IA se dejó escuchar.

—Señor... debo informar que...— pero el ruido de un vidrio quebrándose le alertó.

—¿Qué?— intentó alejar un poco a su pareja, pero era una tarea titánica. —¿Quién más está en el piso?

—Los niños...

—¿Acaso ellos?

—Me temo que si...

—¿Alguien más...? Tony un momento...— obligó al otro a sentarse en el borde de la cama.

Necesitaba ordenar sus ideas y ver cómo ayudar a los niños presentes en el complejo. Tanto Peter como Harley eran unos adolescentes hormonales y la situación actual no era nada beneficiosa, ya que cuando Tony recobre su conciencia como tal le recriminaría sino cuidaba de los menores.

Lamentablemente hoy era uno de esos días en donde al parecer Peter los estaba visitando, lo cual solo significaba problemas si alguien externo...

—Friday...

—El sistema de ventilación está cerrado, nada ingreso en los pisos inferiores...— la IA se tomó unos momentos para añadir. —Pero según mis registros y búsqueda solo se encuentra el joven Parker en la sala.

—¿Harley?

—Una masa amorfa rompió la ventana y se lo llevó. Creí que se trataba de Sleeper, pero al parecer fue Venom quien...

—¿Venom? ¿Puedes llamar a Eddie?

Mientras Stephen ocupaba la poca de energía mágica que presentaba en buscar un antídoto para entregar a los niños, quienes eran cuidado con bastante esmero por parte de Tony, el mencionado se encontraba bastante molesto y celoso.

Si bien el frasco tenía algo similar y tan potente como un afrodisíaco asgardiano modificado, también nublaba la mente. Quien se encontraba con mayor exposición al aroma era más afectado.

Harley se dio cuenta de sus padecimientos por lo que llamó a un amigo, pero fue llevado por el padre, más bien ambos padres.

En el caso de Tony lo único de lo que se daba cuenta era que su interés amoroso le estaba ignorando, más pendiente de hacer aparecer libros, sacos, frascos y objetos... sin olvidar que hablaba con alguien más...

—Habla...— la voz gruesa de Venom se dejó escuchar por el sistema de comunicación ocupado por Friday.

—¿Por qué se llevaron a Harley?

—El niño llamó a Dylan, habló respecto de un problema con Sleeper y éste nos comunicó de llevarlo a donde ellos.

Stephen debía reconocer que era algo serio si Venom se encontraba hablando, tanto, por Eddie Brock.

—¿Y Eddie?

—Eddie acalorado y necesitado. Nos gusta verlo así... tenerlo.

—Mucha información— dijo rápidamente. —Entonces también se vio afectado, al parecer Tony y los niños abrieron un frasco similar a un afrodisíaco, no pensé que fuera potente y alteró a Eddie.