El secreto de Grace ||Terminada

15

Las caras de la moneda

Anónimo

Hay una fina línea entre el bien y el mal, y soy capaz de cruzarla para verte pagar el daño que me has hecho, ¿Cuánta oscuridad eres capaz de soportar, pequeña Grace?

***

Grace

¿Cómo es esto posible? Si mi número sólo lo tienen los chicos. Miré a todos lados asustada intentando conseguir a quién me había enviado el mensaje.

—¿Grace, que te pasa? —preguntó Allan mirándome confuso.

—Na… nada. —Tartamudeé—. Creí ver a alguien, sólo eso. —Aseguré bloqueando mi teléfono y guardándolo.

—¿Seguro? —preguntó Harper.

—Sí, tranquilos. —Sonreí forzadamente.

A nuestro lado llegó la chica con el pedido.

—Tengan. —Nos fue entregando los sundaes uno por uno pero cuando llegó al de Evans sacó un papelito y se lo entregó mientras le dedicaba una sonrisa coqueta y se fue de nuevo a la barra.

Ves, te dije que era una ofrecida.

«Y yo te dije que estabas celosa»

Claro que no.

—Uy, al parecer te quieren enganchar amigo. —Le dijo Harper a Evans burlona.

—No creo que lo logre, a mi me interesa otra persona —respondió Evans fijando su mirada en mi.

—Bueno, ya tortolitos que empalagan —Bromeo Allan— ¿Mañana todos van a clases?

—Sí, obvio. La profesora de matemáticas dijo que nos dejaría un trabajo un poco largo, y ya sabemos como son los “pocos” de algún profesor —respondí con fastidio.

—Cierto. —Farfulló Harper.

—Pues si nos ponen en pareja me gustaría hacerlo con Harper. —Allan la miró y ella se sonrojó esbosando una pequeña sonrisa timida— ¿Te molesta Grace?

—No, ya me aconstumbré a que mis amigos estén ligando y me excluyan.

—No estamos ligando —habló Harper roja como tomate.

—Si claro —dije con sarcasmo.

—Grace. —Interrumpió Evans—. Si quieres yo te puedo ayudar con tu trabajo. —Se ofreció.

—Vale, acepto tu propuesta —respondí gustosa.

«Luego dice que no le gusta»

No me gusta, me llama la atención. Tonta.

«Por ahora»

2 horas más tarde

Ya estaba en mi casa. Había pasado una tarde muy divertida con los chicos y luego Evans me trajo de vuelta, ésta vez no hubo silencio incómodo pues él me contó durante el camino que dentro de 1 semana había una fiesta de Halloween en la universidad, de la cuál yo no estaba enterada.