CAPITULO III

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~Capitulo 3

- ¿Naruto? – preguntó el hombre fuera del auto. Sakura se sobresaltó, Le sonrió a Naruto, este parecía más bien a gusto con todo esto. Trató de bajarse de las piernas de él con dificultad. Una vez sentada en el asiento copiloto, Naruto abrió la puerta.

- Ah… no es cierto… - dijo con una gran sonrisa. Bajó del auto y abrazó con fuerza al hombre que lo acababa de saludar. – joder estás más grande. – le dijo. Y sí, ahora tenía dos tatuajes más y había hecho ejercicio.

- Siempre he sido así, imbecil. – se abrazaron. Sakura miró desde adentro del auto. - ¿se puede saber que haces aquí?

- ¿Nadie me ha extrañado en Konoha acaso? – Naruto  río.

- Vale sí, sí…como sea… y…- trató de observar quién seguía en el auto. - ¿es una amiga? – se volvió hacia Naruto, brindándole una mirada cómplice. Èl negó con la cabeza mientras reía. Si tan solo supiera que Sakura era más que eso.

Naruto abrió la puerta de la Ford. Ella  se volteó a verlo.

- Te quiero presentar a alguien… - le susurró con una bonita sonrisa. Sakura salió del auto de inmediato. Quería ser atenta, diferente. ¿Naruto había tenido otras novias? Bueno, ella quería demostrar que podía ser algo más que solo eso, Naruto la vio rodear el auto, dirigiéndose a los dos – Ella es Sakura.

- Un gusto… - este le cogió la mano, besándosela. Vaya, Louis era un maestro realmente. Lo admiraba de ciertas maneras. Sabía elegir a las mujeres. Y  Sakura no era la excepción.

- Mi novia. – aclaró Naruto. Con una oleada de celos en su cuerpo. Pequeña, pero la había. – él es Sai, un amigo…

- Un gusto también. – le dijo Sakura, de pronto sintió los brazos de Naruto abrazarle la cintura, se volteó a mirarlo.

- ¿Y se quedaran un tiempo aquí? – preguntó Sai.

- Sí, eso planeamos…

- Pensé que no vendrías más.

- Sakura quería conocer… - la volvió a apretar contra su cuerpo, ella le dedicó una sonrisa.

- Sí…pero… - Sai sonrió. Incomodo. – ya sabes… lo último que pasó no fue muy bueno y…

Naruto endureció la mandíbula. Sintió la mirada de Sakura  sobre sus ojos. Buscando una respuesta. Una pequeña palabra proveniente de sus labios que le explicara que había pasado. ¿Qué era lo que ella no sabía? ¿Y por qué no lo sabía? Y al ver que no obtendría respuesta de parte de Naruto, intentó preguntárselo a Sai

- ¿Qué fue lo que pasó? – le preguntó.

- ¡Naruto! – un hombre peligris y alto se apareció por detrás. Tenía un enorme dragón en su brazo derecho, tatuado hace más de cinco años. Su favorito. - ¿Qué haces aquí niño?

- ¿Niño? – saludó Louis. Se volteó para abrazar a Kakashi. – ¡joder has envejecido!

- No, es el ejercicio… me tiene así… - mostró su bícep derecho. – guou… ¿y quién es ella?

- Sakura, mucho gusto. – saludó ella, estirando la mano.

- No, no… el gusto es mío bonita… - estrechó su mano. – no me digas que este campeón – palmeó el hombro de Naruto. – te tiene en sus redes…

- Kakashi… - murmuró Naruto, algo avergonzado. Sakura sonrió.

- Nunca escoges mal, eh. – Kakashi río. Los años lo habían hecho trizas. O al menos Naruto lo recordaba diferente. Más vivo. De otra forma. El color de su cabello había cambiado, al igual que su voz y su aspecto.

- ¿Tienes idea si Jiraiya está en casa? – preguntó el rubio. – me quedaré unos días en Konoha, pero él tiene las llaves…

- Lo he visto en la mañana. Seguro a de estar follando por ahí…

- Kakashi... – volvió a decirle Naruto, esta vez incomodo por Sakura. Ella soltó una pequeña risita. - ¿quieres decir que no está ahora?

- No, probablemente no… - negó él.

- Joder… - renegó Naruto

- Si viene por aquí le diré que has venido, ve y da una vuelta por ahí mientras regresa… Konoha es muy grande…

- Sí, tiene razón. – le dijo Sakura . Con verdaderas ganas de conocer más. Naruto observó sus labios. Le provocaba besárselos en ese mismo instante. No se podía creer lo increíble que era con él. Lo poco que le importaban sus defectos. Oh, vaya. Las ganas se hicieron más grandes. Una idea se le vino a la mente.

- Vale… - dijo, y sonrió al ver que Sakura se contentaba. – iré por ahí y regreso en una hora, si vez a ese gilipollas por aquí… le dices que he venido y que quiero que se vaya de mi casa ¿esta bien?

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