Dulce o Salado

Coincidencia

Mientras tanto, Natalia llegaba al trabajo con una sonrisa en los labios, sin querer ver la realidad de las cosas, con un café en la mano subía hasta su planta y saludaba a todos con alegría...

Ici: Vaya carita (le dijo tras el saludo, con una sonrisa) ni que te hubiera tocado la lotería...

N: Pues casi (contestó contenta) ahora vengo (dijo encaminándose al despacho de Marta, llamó un par de veces y al escuchar la invitación para entrar sonrió y abrió) buenos días (dijo sin dejar de sonreír)

Marta: Hola Natalia (contestó tranquilamente)

N: Te he traído café (lo puso sobre la mesa) supongo que no habrás tomado

Marta: La verdad es que no (contestó mirándola levemente) gracias

N: De nada (se sentó en una esquina de la mesa) ¿mucho trabajo?

Marta: Lo de siempre (dijo sin inmutarse) ¿tú has terminado lo tuyo?

N: Casi (sonrió) solo faltan un par de retoques

Marta: Pues tráemelo cuanto antes (le dijo)

N: Vale (dijo quedándose callada mirándola)

Marta: ¿Algo más? (preguntó al ver que no se iba)

N: No sé... ¿algo más? (le devolvió la pregunta...)

Marta: Ya... (dijo dándose cuenta por donde iban los tiros) Mira Natalia ... lo de ayer estuvo muy bien, pero solo fue sexo... ¿lo sabes no? (preguntó siendo más una afirmación que algo que discutir)

Se tensó, se levantó, se quedó bastante confusa, revivió el momento en el que aquella relación había pasado a ser un simple calentón, ¿podría parecer más tonta de lo que ya parecía? ¿podría ser más estúpida de lo que se sentía? Martala miraba esperando no sabía qué...

N: Ehh... sí, claro (contestó, guardándose todas sus emociones, decepcionada y enfadada con ella misma, haciéndole creer que para ella tampoco había significado nada) solo sexo, sí...

Marta: Pues aclarado (contestó con calma) ahora tengo que seguir trabajando (la invitó amablemente a irse) tráeme eso cuando puedas (continuó diciendo casi sin mirarla)

Se oyó un portazo, Marta levantó la mirada, vio como Natalia salía de allí como alma que lleva al diablo y volvió a su trabajo, por su parte Natalia pasó por toda la sala ante la expectante mirada de Ici que negó con la cabeza, otro más, una vez más su amiga volvía a comportarse como lo que no era, una tonta que se dejaba embaucar por aquella mujer sin escrúpulos...

TRES SEMANAS DESPUÉS

Escuchó el timbre de la puerta sonar, terminó de meter la bandeja en el horno y cogiendo un paño, mientras se limpiaba las manos llegó a la puerta, al abrirla se encontró con la portada de aquella revista tapando la cara de su amiga...

A: ¿Qué se te ha roto ahora, Maria ? (dijo medio bromeando)

Maria : Yo también te quiero (contestó entrando en el piso de su jefa)

A: Pasa y siéntate (murmuró cerrando la puerta...)

Maria : Ummm (exclamó) qué bien huele... (fue hacia la cocina y miró el horno) ¿qué es?

A: Una simple lasaña (contestó)

Maria : ¿Me invitas a comer? (dijo con ganas por quedarse) me encanta tu lasaña

A: Supongo que no me queda otra opción (contestó divertida al ver que se ponía un plato en la mesa) anda, vamos al sofá que le queda un poco aún