Punto de luna || Inglaterra x NyoFrancia

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Resumen: La familia Kirkland requiere de una institutriz para educar a la pequeña Alice, quien comienza a vivir su plena infancia. La mujer que Eleanor contrata es una francesa que bordea los cuarenta años, solitaria, encantadora, llena de vida y con un glamour innato, lo que termina por enamorar a un joven Arthur hasta lo inconfesable. UA. UKxNyo!Francia. One-shot.

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PUNTO DE LUNA

«Se sentía especialmente tierno, tan tierno que disipó sus dudas y su secreta angustia»

(Anais Nïn, «Elena» en Delta de Venus)

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—¿Qué tal la escuela, cariño?

La pregunta de Eleanor queda vagando en el aire por unos segundos hasta que los pensamientos de Arthur la captan por completo. Levanta la cabeza de su cena y mira a su madre, quien espera una respuesta positiva por la mirada encantadora que le dedica.

—Bien, mamá—Responde sin más.

Ella no se queda conforme con aquello, pero prefiere no seguir indagando y como si quisiera hacer olvidar la pregunta a su hijo mira a Alice, su hija menor, entonces recuerda que hay algo que debe conversarle a su esposo de manera urgente porque su niña crece con una rapidez asombrosa y necesita que alguien le enseñe modales cuando ella, una mujer encargada de una casa entera y dos varones tan distintos como cercanos por la sangre, no puede dar abasto con todo. Scott y Arthur son difíciles de hacer congeniar pero si hay algo que ambos respetan sin condición es a la madre que comparten. Agnus, con el carácter de hombre recio que lo ha caracterizado siempre, llevarlo a intentar calmar una pelea entre sus dos hijos mayores era igual de efectivo que rociar petróleo sobre una llama con el propósito de apagarla, mientras que la voz de Eleanor eran los paños fríos de manera indiscutida. Era la dulzura de una madre y la orden de un general fusionados en la misma persona y ellos los meros subordinados que sólo a su voz obedecían.

Scott se había recibido de médico hace unos meses de la universidad de Cambridge pero aún continuaba en su búsqueda de trabajo. Las pocas horas que conseguía eran para hacer visitas a ancianos que esperaban la muerte hasta el agotamiento o niños enfermos de tuberculosis, habiéndose aprendido de memoria cada una de las recetas y los procedimientos con los que intervenir a los pacientes, llevado por la inercia en cada nueva solicitud. Scott esperaba un trabajo estable en el hospital de la ciudad aunque no ganara mucho, pero era eso antes que alejarse demasiado de su familia.

Mientras Arthur se empeñaba en seguir los pasos de su hermano mayor y su padre, Eleanor no podía evitar sentirse orgullosa de la familia de médicos que había forjado con sus propias manos, con esmero, esfuerzo y hasta muchas veces dolor. Porque haber parido a ese par de demonios no fue precisamente la experiencia que más apreciaba de la maternidad, pero amaba a sus hijos con el alma y Alice, la pequeñita de modales toscos, cabello inquieto y gestos traviesos, la hacía sentir que de pronto toda la energía que alguna vez tuvo en su juventud le volvía al cuerpo, como si regresara a los veinte años, donde podía mantenerse eternamente obnubilada por la gracia de sus hijos. Ahora, con cuarenta y cinco años tras su espalda, los cuatro años de Alice se le hacían tan lejanos como inentendibles. Necesitaba ayuda con ella, porque nunca había criado en su vida a otra mujer y ella misma había sido criada con otros dos hombres y sentía que no sería capaz de aprender a hacerlo a esa edad ni mucho menos sola.

Ese embarazo había sido desde el principio una sorpresa. Eleanor, convencida de que después de los treinta y nueve años no volvería a concebir, continuó en su vida matrimonial sin el menor cuidado, aunque Agnus intentara convencerla de lo contrario y cuando Eleanor cumplió los cuarenta y un años se arrepintió de no haberle obedecido. A los nueve meses nació Alice, llegando como una sorpresa para Arthur y para Scott, quien le dijo a su madre, con todo el respeto que se merecía, que para él aquello había sido nada más que un mero acto de irresponsabilidad.

APH: FragmentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora