Mis investigaciones me han llevado hasta E.P.I.C y su mundo virtual, hace un año que me conecto al juego buscando pistas y poco a poco me he ido acercando a mi presa. Mi próximo objetivo es aquella casa done he averiguado que periódicamente suceden cosas extrañas. que pasan cosa extrañas, y eso puede estar relacionado con E.P.I.C. Si todo va bien pronto tendré respuestas.
Todo se inició hace cinco años, cuando Olaf Von Kalaf empezó a jugar con la policía de la ciudad colocando bombas en lugares públicos. Nos enviaba un aviso con pocos datos para que desactiváramos los aparatos explosivos, a algunos llegamos a tiempo, otros... Estallaron, llevándose por delante la vida de muchas personas. Yo era el encargado del caso y un día finalmente arrinconamos a aquel malnacido en un tejado cerca de la plaza mayor. Todo mi equipo y yo nos encontrábamos allí arriba apuntando con nuestras armas a aquel degenerado. La tensión se palpaba al ambiente, no sabíamos dónde había colocado la siguiente bomba y según los datos esta era la mayor que había construido. Empezamos a decirle que nos dijera donde estaba el material, pero él se reía de nosotros y nos amenazaba con pulsar el botón de un aparato que tenía en las manos, que supuestamente era la única manera de hacer estallar la bomba o las bombas colocadas. Mi superior me ordenó que mantuviera la calma y que averiguara donde las había puesto y también ordenó la detención de él, puesto que tampoco sabíamos quién le suministraba los productos, parece que hoy lo hemos averiguado. De cualquier manera, yo recordaba los últimos instantes de una de las víctimas, una niña de apenas 8 años. Yo la tenía en brazos cuando murió debido a las quemaduras. Mi objetivo era evitar esa situación otra vez, así que al ver que no atendía a razones decidí efectuar un disparo. Este disparo perforó el cráneo de Olaf, extendiendo sustancia gris por la zona. No le había dado tiempo a pulsar el aparato, pero segundos después la plaza mayor estalló, dejando lo que ahora se conoce como el cráter del meteorito. El hijo de puta tenía conectados electrodos en su cuerpo, al parársele el corazón, estos activaron la bomba. El resto es historia. Despedido. ¿Lo peor? Que mi mujer estaba almorzando con unas amigas en aquella plaza. Encontré su cuerpo destrozado. Aparte de que mi hija me empezó a odiar y a culparme de aquel suceso. Después de esto estuve unos años echándole a la bebida, hasta que hace año y medio mi vida volvió a cambiar. Lo recuerdo todo cómo si estuviera pasando ahora, y en mi mente lo reproduzco palabra por palabra, pensamiento por pensamiento. La reproducción literal de mis pensamientos de aquel día sería la siguiente:
«Mala mierda que llevo encima. Ya no recuerdo ni mi nombre. A sí. Me llamo Bruce McClaine. ¿Dónde estoy? A sí. En mi casa, rodeado por unas cuántas botellas de Bourbon. Al menos no todas son de esta noche. Que yo recuerdo sólo me he tomado una. Búa, mala castaña que llevo. Pero si yo estaba ya durmiendo la mona. A si, me ha despertado aquel sonido.
Sonaba como un petardo. Voy hacia la ventana a ver si veo a los gamberros que están echando petardos a estas horas y les grito un poco. ¡Mierda! Me acabo de golpear el pie con la mesa y encima he pisado una botella y ahora estoy en tierra con un dolor en el culo y en las piernas. Al menos estoy viendo la luna por la ventana. Uf todo me da vueltas si no puedo ni acertar casi lo que veo. A ver si les grito y me vuelvo a dormir.
¿Que ha sido esto que ha pasado por delante la ventana? ¿Un cuerpo? Estoy muy tocado de la perola, ya veo cuerpos. Bien, al menos ya estoy cerca de la ventana, vigilaré. Mierda podrida sí que es un cuerpo.
Acabo de caer rodando por las escaleras. Qué mareo que llevo. Pediría ayuda si en este edificio no viviera sólo yo. Va, he conseguido levantarme, abro la puerta, la fría brisa me golpea la cara. Mierda, acabo de tropezar, la tierra se acerca rápidamente.
¿Ya es de día? Qué sueño más extraño y qué dolor de cabeza. Vaya una que cogí anoche. Si creí ver cuerpos cayendo por la ventana. Un momento. Esto no la tierra de casa mía. ¡Vaya, estoy en la calle, no puede ser! Allí está el cadáver. La he hecho buena. ¿Esto que suena son bocinas de policía? ¡Vaya! Y yo en calzoncillos y camisa de dormir.
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OMNIAUM
Fiksi IlmiahAlgunos jóvenes se han criado en un mundo virtual sin ser conscientes de que existe uno real al otro lado. Para ellos, tener parámetros de habilidades y subir de un salto a un edificio es algo tan normal como respirar. Estos jóvenes viven en un luga...