Inmortal song-Jinhwi.

7.

Sentía como el viento de la noche alzaba mis cabellos, el frío calaba mis huesos, me sentía desorientado, sentía que apenas despertaba de un sueño terrible, sin embargo sabía que no era así, que en casa me esperaba la realidad, una realidad en la que me duele ser tratado como una víctima y que a la persona que me hizo tan feliz se le considere como mi abusador, ¿por qué?, ¿por qué tenía que ser de esta forma?
Me sentía molesto con mis hermanos por tratar de esa forma a Samuel, pero a la vez agradecido de que intentaran protegerme.

Una figura conocida se acercaba a la acera en donde me encontraba sentado, era papá.

Se quitó la gabardina y me la puso sobre los hombros, solo me abrazo y me condujo hacia casa.

El es la persona más inteligente que conozco, pues sin siquiera una palabra sabia que el entendía el como me sentía.

Narrador omnisciente.

Esa noche fue de locos, era una locura, parecía que la vida de todos ellos era una locura.

Después de que Daehwi saliera corriendo Samuel se separó de Minhyun y comenzó a gritar el nombre de Daehwi mientras intentaba correr detrás de él, sin embargo otro golpe de Minhyun no permitió que pudiera seguirlo.
Llegaron los papás de los hermanos Hwang, y al notar la falta del más pequeño de ellos entraron en pánico, la madre de Daehwi comenzó a alterarse y se volvió un manojo de nervios, el padre de los chicos dijo que el lo encontraría, que estuviera tranquila y salió en búsqueda de su hijo menor.

Samuel se retiró de la casa a petición de la mamá de los Hwang, fue llevado por Ong y Sungwoon y durante todo el camino ambos lo pusieron al tanto de todo lo que ocurrió con Daehwi en su ausencia, claro, acompañado de un sermón enorme, al llegar a su casa, la mamá de Samuel casi se desmaya al ver la cara de su hijo.

En casa de los Hwang parecía que la tormenta más grande había pasado. Jaehwan y la mamá de los Hwang intentaban curar a Minhyun, y claro que estaba recibiendo el regaño más grande de su vida por su comportamiento, fue difícil curar a Minhyun pues el insistía en ir a buscar a su hermano menor; Somi comenzó a romper en un horrible llanto pues decía que había dicho cosas horribles sin considerar lo que Daehwi sentía y se repetía la mal hermana que era, y su pobre madre solo trataba de consolarla.

Todo cesó cuando cruzó el umbral de la puerta el delgado cuerpo de Daehwi, detrás de él venía su padre quien hizo una señal de silencio con un dedo en la boca a todos los demás.

Y sin dirigir una palabra o una mirada a alguien Daehwi subió a su habitación.

Al siguiente día en casa de los Hwang todos los miembros excluyendo al menor platicaron acerca de la situación de este, los padres regañaron a los mayores por su forma de actuar pero agradecieron por intentar ayudar a su hermano, al final llegaron al acuerdo en que no presionarían a Daehwi en lo absoluto, que Daehwi decidiría que hacer y todos lo respetarían, que le darían su espacio estos días y otras cosas.

Daehwi no bajo de su habitación ese fin de semana, permaneció acostado, nadie entraba a su habitación, más que su madre, quien le llevó las comidas, intentaba platicar con el y limpiaba sus lágrimas mientras le daba consejos, palabras de amor y lo abrazaba; por otro lado, sus hermanos se acercaban de vez en cuando a la puerta para preguntar si el necesitaba algo y su padre solo le deseaba los buenos días y buenas noches.

Samuel, por todo lado, se sentía devastado, no podía con aquella culpa, jamás se había puesto a pensar en todo el daño que había causado en Daehwi; no sabía si lo que había hecho anoche era lo correcto o había cometido un error, su madre en un inicio lo regaño, después le contó que ella estaba profundamente orgullosa de que su hijo fuera fiel y valiente a sus sentimientos, lo escuchó y aconsejó. No salió ese fin de semana, se encontraba demasiado perturbado pues había dañado a quien amaba, pensaba en cómo podría hablarle a Daehwi y también pensaba si era mejor luchar por su relación con el o simplemente dejarlo ir, se sentía triste, como nunca, culpable, pues jamás pensó que haría llorar a ese niño que había conocido hace años y que defendía de todos y todo. Se sentía horrible y no sabía que es lo que debía de hacer. Que era lo mejor para Daehwi.