2.

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Cuando entró, Jackson vio a Mark sentrado tras la mesa, mirandola a la nada, sus ojos rojos e hinchados, una copa de vino en su mano.

Fingiendo una tranquilidad que no sentía, cerró la puerta tras él, y el sonido hizo que Mark le mirara.

Su esposo parpadeó para luego sonreír levemente.

Jackson llevaba sin verlo tres días, en los que estuvo durmiendo en un hotel para darle su espacio, y estaba esperando, y estaba esperando que cuando se vieran, Mark comenzara a llorar y pedirle que se alejara, no que le sonriera.

la carta de divorcio en su bolso pesó un poco más. Necesitaba ser firmada para llevar a cabo el trámite pronto, así que sí o sí tenía que hablar con Mark en ese instante.

--Te extrañé mucho--comentó Mark de pronto poniéndose de pie.

Antes de poder decirle algo, Mark le dio un beso suave en los labios.

Su estómago se contrajo, atónito.

se alejó, arrugado el ceño en confusión.

--Pensé que no vendrías a cenar--prosiguió Mark como si nada, sin dejar de sonreír--,estaba a punto de llamarte.

Abrió la boca, pero las palabras no salieron de su boca, aturdido.

¿Acaso...?

Miró hacia abajo, viendo los papeles de divorcio.

--Mark-- dijo con la voz suave--, vine para que firmes los papeles.

Y los levantó.

La hermosa sonrisa de corazón que le había enamorado cuando era más joven se convirtió en un mohín de dolor, pero no retrocedió. necesitaba hacer eso pronto. Una vez los papeles fueron firmados, sacaría sus cosas de la casa para irse a un pequeño departamento que vio los últimos días.

Mark sacudió la cabeza.

--¿Qué dices, Jackson?-- preguntó con la voz temblando--¿Papeles de qué?

Suspiró.

Se lo había planteado: cuando los papeles estuvieron listos pensó que Mark podría reaccionar de distintas formas, y la negación.

Jackson habría preferido que Mark colapsara, le gritara, le rogara, le tratara mal y no quisiera mal y no quisiera verlo más, pero no que se esforzara en negar lo que era inevitable. Negarlo era lo peor, porque significaba que Mark seguía teniendo esperanza alguna de que lo que había ocurrido fue sólo una broma o, peor, un invento.

--De divorcio--dijo sin perder el tono suave.

Mark parpadeó

--Oh--fue lo único que dijo.

Se dio vuelta antes de que Jackson pudiera añadir algo.

Jackson percibió, entonces, que el más alto estaba pálido, con ojeras bajo sus ojos hinchados, sus labios resecos y partidos. Incluso podía notar que su rostro estaba más delgado. Le preocupó que Mark no hubiera comido bien los días anteriores, sin embargo, no se atrevía a preguntar.

--Preparé tu plato favprito--dijo Mark entonces sin mirarlo

--Mark-- ahora su voz salió dura--, por favor, no hagas esto más difícil.

--Difícil--repitió Mark--. N o lo entiendo.

Sintió como se desesperaba, algo se estrujaba al ver los ojos de Mark, tan cálidos y tiernos, pero llenos de un infinito dolor que parecía sacudirlo por dentro que parecía sacudirlo por dentro, que le rompía en mil pedazos. esos que siempre parecían contentos y felices ahora estaban asustados temorosos de él.

Apego;; MarkSonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora