Mamá por contrato||YoonMin⛾Omegaverse||

V

HoSeok está sentado frente a mí, sus ojos me miran fijamente y sus labios se fruncen en descontento.

Después de que Min llego del trabajo, salí con el pretexto de ver a HoSeok, lo cual era completamente cierto.

—Entonces... ¿se acercó a los niños?

—Si— todo esto me trae mala vibra — Pero no lo pude ver por ningún lado.

Suspiro y HoSeok mueve impaciente su pierna de arriba abajo.

Dirijo mi mirada hacía el reloj de la pared para darme cuenta de que ya son las ocho y media de la noche. Me levanto tomando mi teléfono.

— ¿Te vas?— Mi hermano también se levanta, jala rápidamente su chaqueta y me toma del brazo. Sonrió y salimos de su oficina. — Yo te llevo, no me permitiré descuidarte nuevamente.

Se me hace chistosa la escena cuando recuerdo que en la secundaria era yo quien cuidaba de él.

El silencio que nos envuelve mientras bajamos en el ascensor hasta el estacionamiento es cómodo pero aun así me permitió romperlo.

— ¿Cómo te va con ChanMi?

Anteriormente había visto los mensajes que la beta le manda a mi hermano. HoSeok comienza a mover su mano sobre mi brazo nerviosamente y no logra esconder de mí la sonrisa enamoradiza.

— Es una buena beta.

Arqueo una ceja. Ambos subimos a su carro nada más salir del ascensor, el abre la puerta para mí y mientras el da la vuelta para ir al lado del conductor, yo pienso mi siguiente pregunta.

Cuando termina de subir prende el radio y arranca el carro.

De esta no te escapas, maldito.

— ¿Cuándo pensabas decirme que te gustaba?

HoSeok ríe y voltea a verme con el ceño fruncido. — ¿Podemos olvidar este tema?

Su aroma comienza a encerrarse en el auto por lo que abro un poco la ventana. — Noooo, cuéntame.

El niega con la cabeza. —Eres un chismoso Park JiMin.

— Lo sé, ahora dime: ¿qué ha pasado entre ustedes?, pillos...

Muevo mis cejas de arriba abajo sugestivamente. Prendo el GPS y pongo la dirección de la casa de Min para no perdernos.

— Bueno... Yo...— se aclara la garganta y ríe nerviosamente, lo que me hace reír a mí también. Cuando ambos calmamos nuestra risa, HoSeok prosigue: —No es nada del otro mundo, ¿te acuerdas que mamá nos dijo una vez que cuando encuentras a tu pareja destinada el mundo desaparece y sientes como si flotaras?

Cubro mi expresión asombrada con ambas manos y doy un gritito ahogado.

¡Dios mío!

— ¡Por ahí hubiéramos comenzado!

Veo a mi hermano ruborizarse y soltar más de su aroma.

Cuando menos lo espero HoSeok ya se está estacionando frente a la casa de YoonGi, en medio del carro de Min y uno que es completamente desconocido para mí.

Mi hermano baja primero y se aproxima a mi puerta para abrirla y ayudarme a salir. Le agradezco y cuando pienso que se va a ir, me sigue.

Elevo una ceja de forma interrogante. — Quiero conocer a tu jefe.

Hace comillas con los dedos cuando pronuncia "jefe" y se para detrás mío.

No tengo que tocar dos veces el timbre cuando YoonGi ya está frente a mí con el ceño fruncido. Ambos alfas se ven fijamente y me siento analizado cuando Min baja la vista y se encuentra con mis ojos viendo tontamente sus expresiones.

Rápidamente se recupera y se hace a un lado dejándonos pasar a ambos.
HoSeok estira su mano frente a YoonGi y por primera vez le regala una sonrisa característica suya.

— Hola mucho gusto, soy el hermano de JiMin, HoSeok.

YoonGi termina por estrechar sus manos y le da una pequeña sonrisa.

— Min YoonGi— YoonGi se voltea a mí — Mis padres llegaron de improviso— Al parecer la noticia no me ha caído bien y se ve en mi rostro porque YoonGi se apresura a negar con la cabeza. — No son como piensas que son.

— ¿Quieres que me vaya?

HoSeok está atrás de mí sin saber si meterse o no a la conversación.

— No, solo que...

Min es interrumpido por la presencia de una mujer con la sonrisa más grande y bonita que he visto.

— ¿Él es JiMin?

Veo al alfa asentir. HoSeok se remueve y me toma del brazo.

La mujer ve a mi hermano y también le sonríe. — ¿Quién es su acompañante?

— Soy HoSeok, su hermano, mucho gusto.

Sin saber si acercarse o no, HoSeok solo mueve su mano de un lado a otro en forma de saludo. La mujer sonríe aún más, si es que se puede.

— YoonGi, trae a tu omega y a su hermano a la cocina, acabo de terminar de hornear las galletas.

Mis ojos se abren y YoonGi me hace una seña para que guarde silencio. Necesito una explicación, ¡LA NECESITO!

Le sonrió a la señora Min. HoSeok ya camina a su lado preguntando de qué sabor son las galletas.

Traidor

— Ayúdame— me susurra Min y me muestra su teléfono con su cuenta de banco abierta, lista para hacer una transacción.

Veo mis zapatos, trato de hacerme el difícil por un momento, no lo veo a la cara, pero cuando hago mi camino a la cocina lo veo sonreír, teclear en su teléfono y seguirme.

Ya en la cocina veo a un señor parecido a YoonGi sentado viendo a la mamá de YoonGi darle a HoSeok galletas con chispas de chocolate como si de un niño se tratara.

Cuando me ven sus ojos también sonríen y me invitan a tomar asiento junto a YoonGi.

— JiMin, querido, toma asiento junto a YoonGi, ¿Quieres un poco de café?

— Si no es mucha molestia.

Ante tanta atención mis mejillas comienzan a tomar color.

La señora Min niega con una sonrisa y me pasa una taza con café y leche.

Nunca pensé que la vida fuera tan buena.

Pienso cuando pruebo la primera galleta.

— Díganme, ¿cómo fue que YoonGi encontró a tan hermosa criatura?

YoonGi y yo nos damos una rápida mirada.

[04/06/2020]