Masacre en Russell

• C u a t r o •

Loana Lobo POV.

Me acerqué cada vez más a la habitación con mi nombre en la puerta, al entrar vi una silla en medio de la habitación, todo estaba oscuro, salvo por una pequeña bombilla que a duras penas alumbraba.

- ¿Sabes quién soy? - preguntó una voz masculina, su voz era igual a las que usan en los videos de miedo.

- No lo sé, ¿qué hago yo aquí? - dije, no podía ver su rostro ya que llevaba puesto un antifaz de gala y una bata negra.

- Soy.. - paró. - se me olvidó, no puedo decirte. - dijo con malicia.

- Como sea, este sitio no me agrada, ¿qué hago aquí? - volví a insistir.

- Por lo pronto no entenderás, pero, me volverás a oír.

El hombre volvió a la misma oscuridad de la que salió, un fuerte sonido de una pistola me despertó.

Me levanté sudando, mi respiración estaba muy agitada. Después de ese extraño sueño, salí de mi habitación, mi abuelita Rose y mis hermanos se encontraban en la sala viendo una película, era fin de semana, por lo cual no tenía ningún deber. Me uní a ellos y después de unas cuantas horas decidí salir con Emily y Teresa al mall que está cerca del Instituto. Caminaba mientras tarareaba una canción, pasé por el callejón de Mirlo cuando vi algo brillante, me detuve y iba en dirección a ver que era aquello, paré en seco cuando oí voces, me escondí detrás de un bote de basura.

- ¡Necesitas ayuda! - dijo alterada una voz femenina, su voz era muy familiar, la voz se alejaba y una puerta se abrió, de ahí salió otra cosa brillante.

- ¡Ellos o yo, mientras que haga lo que piden, yo estaré en paz! ¿¡que no entiendes eso, Curie!? - quedé helada cuando un automóvil pasó y alumbró el callejón, las dos personas llevaban el mismo disfraz y una misma bata que vi en mi sueño. La muchacha era de estatura media, su bata era de color rojo con brillantina, mientras que el otro tipo llevaba una bata negra, igual que en mi sueño.

- ¡No, no entiendo, sabes que Kisha únicamente te quería ayudar! - tapé mi boca. Me arrepentí por no haberle creído a Kiara.

- ¡Cállate, Curie, estoy a punto de asesinarte a ti también! - gritó el hombre, su voz era idéntica a la de Alejandro. La muchacha se dio la vuelta y entró por la puerta. Salí corriendo de ese lugar, tratando de no hacer ruido.

¿Que mierda es esto? ¿Alejandro a sido el causante de todo este embrollo? Acelere mi paso hasta llegar al Mall, divise a Emily y Teresa en una mesa del Starbucks.

- ¡Hola, Loana! - dijeron al unísono, se veían muy feliz ambas.

- Hola. - respondí sin mucha emoción, mi mente todavía estaba en shock.

- ¿Qué te ocurre? - preguntó Tere.

- Acabo de enterarme - me detuve, solo le podía contar de esto a Kiara, si no, ellas también creerían que estaba loca. - ¡De que un vestido súper hermoso estuvo en rebaja! ¿Pueden creerlo? ¡Me acabo de enterar, y ya lo compró Melissa, ha de verse espantosa! - dije con voz triste y enojo, en gran parte era verdad, pero eso había sucedido ayer.

- Nosotras también la detestamos. - habló Emi, mientras veía a Teresa.

La plática siguió, no podía dejar de pensar en lo ocurrido. No ponía mucha atención a lo que me contaban ellas. Vi a Kiara y Michelle en otros asientos, no muy lejos de los nuestros.

- ¿Podrían darme un momento? Ocupo hablar con Kiara y Michelle, están detrás de nosotras. - ambas voltearon a ver y se saludaron. Me levanté y me dirigí a ellas.

- Kiara, perdóname por no creerte, en serio. Hace unas horas me pasó algo muy extraño, y tengo miedo, por favor, te pido que me creas, no son inventos míos. - supliqué.

- Lo que sea que tengas que decir, dilo. Michelle puede escuchar, estoy segura de que ambas sabemos a que viene esto.

Les conté exactamente lo que sucedió. Ambas me miraban con asombro. Pero más quedé yo sorprendida con lo que me contó Michelle.

- Chicas, no puede ser. Esto ya no son juegos, algo muy retorcido esta ocurriendo, solo nosotras sabemos, pero, tenemos que hacer algo y pronto. Tenemos que ir a la policía ahorita mismo. - dije con preocupación.

- ¡No nos van a creer! - Exclamó Kiara.

- Creo que si podemos hacer algo. - propuso Michelle.

Me despedí de Emi y Tere, les dije que me había ocurrido una emergencia y ocupaba retirarme.

***

- Buenas tardes señora Sú, ¿está Alejandro aquí? - preguntó Michelle.

- No, pero pronto viene, si gustan pueden pasar - respondió Sú. La madre de Alejandro es Asiática. - ¡Saylin, llama a tu hermano y dile que se apresure! - Hablamos con Saylin mientras tanto. Después de 10 minutos Alejandro llegó, le pedimos que fuéramos a otro lugar.

- ¡Eres un hijo de puta! - fue lo primero que dije cuando llegamos al parque, me estaba resistiendo a no pegarle.

- ¿Que mierdas estás diciendo? - respondió con sorpresa.

- ¡No lo ocultes más, maldito enfermo! - dijo Kiara con rabia. - ya sabemos lo que le hiciste a Kisha.

- ¡Tu asesinaste a Kisha! - habló esta vez Michelle. - ¡Eres un desgraciado, dinos toda la verdad o vamos a llamar a la policía en este instante!

Alejandro se río.

- ¡Wo, no fumen tanta hierba! - dijo con gracia. Las tres lo fulminamos con la mirada.

- Es por las buenas o por las malas, habla ya, Alejandro. - le di una fuerte cachetada.

- ¡Ustedes son las locas! - dijo adolorido mientras se tocaba la mejilla, la cuál le había dejado roja.

Una patrulla de policía se detuvo, rápidamente dos policías se bajaron de esta.

- ¿Que está pasando aquí? - preguntó el que sea veía más mayor.

- ¡Pasa que el es un asesino! - Kiara señaló a Alejandro.

- Perdón muchacho, pero si dicen la verdad o no, tiene que venir con nosotros, y ustedes. - dijo el más joven viéndonos a las tres. - si esto es una acusación falsa, van a tener serios problemas con la ley.

- ¿¡Pero qué!? ¡Yo no he hecho nada! - se defendió, en su rostro había mucha confusión.

El policía mayor lo arrestó y lo subió a la patrulla. Las tres nos miramos, espero que tengamos razón en todo esto, hay que hacer justicia por Kisha.

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¿Alejandro será el asesino? :0