Las personas nunca cambian.
Como era costumbre, Nathaly limpiaba todo el desastre de su novio, botellas por todos lados y el olor a borracho que ya le mareaba.
-Solo tengo que aguantar un poco más.- hablaba para si misma hasta que escuchó la puerta abrirse.-Adiós, guapa.- Castiel besó los labios de una chica rubia y cerró la puerta, su mirada cambió a la misma de siempre, odio.
-Tengo hambre ¿Hiciste algo de cenar?- Preguntó molesto.-Hola también, si tienes hambre ve y prepárate algo tu mismo.- dijo firmemente, no queria estar con él por lo que intentó irse a otra habitación para evitar una discusión. Pero un brazo la detuvo.
-DIJE QUE TENÍA HAMBRE, SIRVE DE ALGO MUJER.- Apretó fuertemente el brazo de la mujer intentando llevarla hasta el sofá.
-SUÉLTAME- Apenas divisó el cuchillo lo tomó con su mano libre.
-Te dije que me soltaras- No tenía idea de lo que estaba haciendo, solo por un momento sintió que podría desafiarlo y puso el cuchillo en el cuello del hombre.- ¿Qué mierda haces?- Y con tan solo unas palabras, ella se acobardó y soltó el cuchillo.
Mala elección
El pelirrojo la tomó del cuello usando toda su fuerza para dejarla sin aire, su cuello era tan frágil que sentía que podría romperlo en cualquier momento.
Luchó, y por más que trató de soltarse del agarre del pelirrojo éste solo ejercía más fuerza y más fuerza.
Deseó morir solo cuando sintió que ya no podía más y que iba a morir, Castiel la soltó solo para aprovecharse de ella, otra vez, solo que ahora se desmayó del dolor.-Ni para complacer a tu novio sirves- Dejó a la chica en el sofá para luego vestirse y dejarla sola, desnuda y aún inconsciente.
¿De verdad me amas?

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Toxic [CDMU]
Fiksi PenggemarPara ella, todos sus golpes eran amor. Nathaly Jane Ramos