Suspiros de Melancolía (kookjin)

parte doce

Jin

Quien diría que al final de la noche, si terminaría bebiendo un par de tragos.
Después de darle el paseo a mepo pasamos por algo de comida y algunas bebidas y llegamos a mi casa. Pusimos una película y al terminar seguimos bebiendo como si no hubiera un mañana...

¿Donde compraste a esa... enorme cosa peluda?
Yoongi escurría la botella en su vaso— no, no... *niega* no lo compre... yo no... el fue un regalo... ¡de la vida! —el alcohol siempre me hacia sentir mas caluroso, empalagoso

¿Un regalo de la vida? Ja! pues... yo hubiera preferido 1 billón de dolares!... no eso!
Las mejillas de Yoongi tenían un color rosado y sus ojos se cerraban un poco. Bajo su mirada y el silencio se hizo presente, solo las respiraciones de mepo dormido a mi lado se escuchaban.

El seguía pensativo y yo al mirarlo así, sabia que quería decirme algo... pero yo no se, si quería escucharlo.

—y...

Pensé que si lo habrías echo... *interrumpe*

—...¿que?

Me miro calmó y dijo;

Suicidarte...

Deje de mirarlo para calmar el ardor en mis ojos

—pues ya ves que no...

¡Y eso me alegra Jin!... ¿Sabes que no podía sacarte de aquí?...
Golpeo su cien con sus largos dedos blanquecinos

—¿Yoongi, porque te fuiste?

Paso sus manos por su cabellera y dejo salir un gran bostezo

Hice algo muy estúpido y como teníamos ya una sentencia...

—¡¿te metieron a la cárcel?! —me preocupe de solo imaginar a Yoongi encerrado en un lugar así.

Al verlo asentir me acerque a el para mirarle a los ojos y asegurarme de que no me estuviera jugando una broma —¡¿Yoongi estuviste en la cárcel?!

Si... fueron, dos años... pero descuida no me pesaron... Me sonrió y metió a su boca un limón partido para sacarlo segundos después ya exprimido

—pero... ¿Que fue lo que hiciste?

Nada que el hijo de puta no se mereciera!...