Amor prohibido [PAUSADA]

Capítulo 12

-¿De verdad que no quieres venir?- dice Kevin insistiendo a que vaya a su fiesta de cumpleaños.

Niego con la cabeza sonriendo. Pone puchero pero sigo haciendo el mismo gesto.

-Bueno...la gente llegará en unos minutos- y suena el timbre.

-Adiós, que te lo pases bien leyendo- dice de broma.

-Igualmente- cierro mi puerta, con pestillo, me pongo en mi cama y comienzo a ver Netflix.
Este plan nunca falla.

Me recuerda a cuando me quedaba en casa de mis amigas a dormir y veíamos pelis, comíamos sin parar, nos asustabamos cuando salía algo aterrador en la pantalla del ordenador.
Volvería a esos tiempos una y otra vez. Sin pensarlo.

Ya huele a fiesta, la música va sonando lo más fuerte posible, se oye la gente hablar, gritar y el suelo prácticamente tiembla.
En resume ASCO.

No sé porque les gustan tanto las fiestas, es de lo más absurdo, yo puedo bailar en mi habitación con la música en mi móvil y mirándome en el espejo super motivada, me lo puedo pasar bien sin necesidad de emborracharme o liandome con tíos.

Ya me he visto dos películas y la fiesta sigue, esto tiene para largo.

Se oye unos golpes que viene desde detrás de la puerta.
Me levanto y pregunto que quién es, la abro cuando me responde Alex.

-¿Ya te has cansado? Oye ¿estás bien?- está llorando como un bebé.

Mi abraza y siente consuelo, ya no llora tanto.

-Ey ¿qué ha pasado?- se separa de mí y se limpia las lágrimas.

-He visto a Kevin besando a una tía y me estoy muriendo por dentro- espera que le importa a Alex si Kevin se besa con una, espera ¿es gay?

-¿Eres gay?- pregunto y asiente.

-¡No puede ser!- voy hacia él y lo abrazo

-Siempre he querido tener un amigo gay- digo contenta, rápido se me pasa al recordar que él lo está pasando mal en estos momentos.

Aún así ríe triste tras mi locura.

-Lo siento, pero ¿sabes qué? Si él hace eso es porque no te valora y si no te valora no te merece, ahora soy yo la que te digo que tengas cuidado, eres una gran persona.- se sienta en mi cama y hago lo mismo.

-No pero es que él no sabe nada, no sabe que me encanta desde hace mucho.

-Entonces no le puedes juzgar por lo que hace, sé valiente y cuéntaselo.

-Ya pero ahora no lo voy a poder mirar ni a la cara.

-Vamos Alex no seas así, baja y disfruta- se pone de pie.

-No pienso bajar hay, si bajo me da algo, solo si...¡bajas conmigo!- otra vez no por favor. Niego y pongo los ojos en blanco.

-No seas así disfruta vamos- ahora mismo no sé lo que hacer, si dejarme llevar por un amigo un apuros o seguir en mi cama tranquila.

Pero soy muy buena amiga y no le puedo hacer esto a Alex y no pasará nada tampoco, será un rato y me subiré.

-Está bien- digo en bajito

-¿Qué?- asiento, Alex me levanta del suelo y empieza a darme vueltas.

-Eres genial- dice

-¿Qué te vas a poner?- dice, levanto el dedo y me voy en dirección a mi armario indicando a que se espere.