In love? Never |Liam Payne| TERMINADA

Capítulo 28-Eso es todo

Desde ese día todo había pasado rápidamente.

Gemma y Madison ya habían salido del hospital y ahora estaban en la casa, con Niall.

Eran los padres más tiernos y preocupados que había visto, amaban con locura a su pequeña hija y yo amaba estar acá, en su casa, disfrutando a la pequeñita.

Pasando a otro tema, el chismoso de Connor apenas llegó a LA le contó a mi madre que lo había echado de la casa y un montón de cosas más.

¿Lo podían creer? Porque yo, al principio, no.

El resultado fue que yo quedé como la mala de la película.

Mi madre me llamó para regañarme, estaba muy enojada conmigo, pero yo le expliqué todo, absolutamente todo, y eso disminuyó en parte su enojo, por suerte, o sería horrible no tener el apoyo que durante estos meses me había dado.

Otra cosa era que había decidido quedarme en Londres por un mes, pasaría la navidad acá y también el año nuevo. Así aprovechaba mis vacaciones de una muy buena manera y me relajaba junto a mis amigos, además podía hacerle compañía a Gemma y a Madison. Siempre era necesario un poco de ayuda.

Madison, mi linda calvita de ojos celestes, así le decía yo y eso fastidiaba a Niall.

Y  para terminar mi resumen de tres días, en este mismo instante esperaba a Liam.

Sí, a eso me refería con que había pasado todo muy rápido, había salido un par de veces con él (Me había invitado al cine y a cenar) y cada vez había más acercamiento y confianza entre nosotros.
Era como si él quisiera que lo intentaramos otra vez, pero no lo decía directamente.

Eera extraño.

Sin embargo, lo pasábamos muy bien juntos, eso no había que negarlo.

Hoy iríamos a elegir un regalo para el bautizo de Madison y como eramos sus padrinos era nuestro deber comprarle algo.

Estaba tan emocionada por eso que ya pensaba en un regalo perfecto y era difícil hacerlo, porque esa niña podía tener todo lo que quisiera.

El motor de un auto me sacó de mis pensamientos.

Estiré un poco mi cuello para ver por la ventana que estaba al lado del sofá en donde estaba recostada y observé quien estaba afuera.

Reconocí enseguida el auto de Liam.

Me levanté de un salto cogiendo mi cartera negra y me acerqué a la escalera.

-¡Me voy!-grité.-¡Adiós, chicos!

Ellos me gritaron a coro un "Adiós, cuídate" y me fui a la puerta.

Salí y cerré con llave.

El frío de diciembre que impactó contra mi cuerpo me hizo temblar.

Estaba para congelarse.

Fui trotando hasta el auto y subí en un segundo.

-Hola Liam- besé su mejilla.

"Está suave ¿Qué crema usará?"

-Hola. Estás helada.

Me sonrió y yo también.

-Hola Paddy.-me incliné entre los asientos delanteros para verlo.

-Buenas tardes.-dijo simpático.

Me acomodé en el asiento y observé a Liam con su pose relajada.

Traía jeans negros, zapatillas blancas, una playera negra y una chaqueta de cuero del mismo color.