Epílogo

780 16 0
                                    

Cinco años después.

Observé mi vientre abultado cubierto por un vestido color crema en el espejo y sonreí.

Sólo faltaba una semana para que se cumplieran los nueve meses y pudiéramos conocer a nuestro bebé.

Grandioso ¿No?

Lo único que queríamos era tenerlo en nuestros brazos y estábamos ansiosos esperando el momento en que otra evidencia de nuestro incondicional y perfecto amor llegara para alegrar todavía más nuestras vidas.

Incluso nos habíamos estado preparando dos semanas antes de la fecha indicada -que era a finales del mes según la doctora Laxel-, por lo que ya teníamos una maleta con ropa mía y del bebé que no se separaba de la puerta y un plan de emergencia que incluía llaves y teléfonos.

Eso es todo lo que no habíamos hecho hace cuatro años, el día en que James estuvo listo para llegar al mundo.

Aquella vez Liam se volvió loco y no sabía qué hacer, había perdido toda la cordura y la madurez que lo caracteriza.

De verdad que nunca había visto a Liam comportándose de esa forma. Ya creía que iba a tener que internarlo en un centro psiquiátrico.

Por suerte estaban todos presentes o yo con mis contracciones hubiese tenido que despertar a Liam del desmayo.

¡Sí, se desmayó! Luego del show de histeria tuvo el descaro de desmayarse sobre el líquido de amniótico de mi fuente rota.

Un caos.

En fin, sin dar mayores detalles, fue una hermosa y terrorífica experiencia de traer al mundo a nuestro primer hijo.

Volviendo al tema del segundo bebé, sería un parto natural justo como su hermano y no con una cesária programada. Lo Prefería así. Además, el sexo sería sorpresa, lo sabríamos al momento de su nacimiento.

Podía ser otro niño o una niña.

-Acá estás, nena.

Su voz me hizo despertar de mis pensamientos y lo miré sonriendo.

Estaba tan guapo con los jeans desgastados, la playera negra y sus típicas zapatillas.

Me daban ganas de untarlo con nutella y comérmelo.

Y ni hablar de la creciente barba que adornaba su bello rostro y le daba un toque de madurez muy sexy.

Uff y esos ojos mieles cautivantes...

-Vine a cambiarme el traje de baño mojado y me distraje-dije y lancé al sofá la toalla con la que estaba secando mi cabello.

-Me lo imaginé-Liam se acercó y con cuidado de no aplastar al bebé me abrazó recargando su cabeza en mi hombro descubierto.

-¿Ya van a cantar el cumpleaños?-acaricié lentamente su cabello con mis dedos y mi cuerpo se balanceó como si estuviéramos bailando.

Me encantaba hacer eso y apoyarme en él cuando estaba cansada.

-Sí, James está como loco-rió y su risa me rozó el oído provocando que múltiples sensaciones recorrieran todo mi cuerpo.

-Entonces bajaremos, no quiero que espere más-me solté de su agarre dejándolo confundido y caminé hacia la puerta.

-¡Hey!

Me detuve y lo miré.

-¿Si?

-¿Y mi beso cuándo?

Solté una carcajada.

-¿Te lo mereces?

Frunció el ceño y dio unos pasos hacia mi.

In love? Never |Liam Payne| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora