No Quiero Esto...

Capitulo 10: Cara de Diablo

Capítulo 10 cara de diablo

Pasar la noche con Elian no fue como todo el mundo se lo imaginaba. No hubo besos, no hubo caricias seductoras, no hubo cortejos para intentar tener sexo, no hubo sexo. Tampoco hubo conversaciones profundas en las que te sinceras y se cuentan sus secretos más profundos.

Pero si hubo risas, hubo temas banales, y hubo muchas miradas en las que me di cuenta lo guapo que es. Elian tiene un encanto natural, de esos que no te das cuenta hasta que ya estás sumergida en el. Elian te enamora y tu ni siquiera eres consciente de eso hasta el momento en el que ya no puedes dejar de verlo o escucharlo, en el momento en el que el no está y tu no puedes dejar de suspirar por el. Sus pláticas son las más interesantes y toda la noche estuve rogando para que no parara de hablar.

El hablaba y hablaba, yo no me cansaba de escucharlo, sus temas sobre la gastronomía y sus estudios en España me mantu ocupada toda la noche, hasta que nos dimos cuenta que el sol estaba saliendo y fuimos a dormir. El se quedó en la habitación de huéspedes y yo en la mía, solo pude dormir una hora cuanto mucho pues la emoción no podía conmigo. "Dormimos" unas cuatro horas, después el se levantó  y me dijo que tenía que marcharse, le salieron unos imprevistos en el trabajo por los cuales no pudimos desayunar juntos.

—¡¿Cómo que no te acostaste con ese pedazo de ángel?!—Alexis recarga sus brazos en la isla de su cocina acercándose más a mi.

Estoy en su departamento después de cinco días de lo ocurrido con Erick, Elian y yo. Ella se enteró pero se propuso guardar las preguntas hasta vernos en persona.

—¿Pedazo de ángel?—pregunto después de una carcajada.

—Oh, ¿no me digas que tu lo vez más como un diablo?—sube sus cejas de manera sugestivamente.

—No lo veo como nada de eso—tiro una papa frita en su rostro. Ella gruñe, la recojo de la barra y la mete en su boca.

—No puedo creer que no te hayas acostado con el, es más no puedo creer que no lo hayas besado.

—No se ha dado la oportunidad de nuevo—me encojo de hombros.

—Eres una mentirosa, el te ha intentado besar pero tú no le das el paso, y eso es repugnante porque el te ha de llevar al cielo con esos labios. Bueno al infierno porque ya quedamos que es más diablo que ángel—Ella recarga su cabeza en su mano.

—Cállate—le doy un golpe a su mano haciendo que su cabeza caiga—, no es diablo ni ángel ni nada de tus ideas sexuales.

—Oh vamos, no me digas que no te han dado ganas de intentar algo más con el. Dejémoslo sin compromiso, ¿no te ha dado ganas de hacer algo con el? Simplemente por diversión, sin compromiso ni pasos apresurados. Solo porque tú quieres.

Si, más de una vez. Pero no pienso decirle eso, se que lo usará en mi contra.

—No, y ya cambia el tema.

—Uh no me puedo ni imaginar el gran orgasmo que te dará. Tienes todo oxidado ahí abajo y mucha tensión acumulada que terminarás explotando.

—¡Ya cabía el tema!

Alexis ríe y se tapa su boca mientras las carcajadas no cesan de su boca.

—Poniéndonos más serias—cruza sus manos encima de la barra—. No puedo creer que no le partiste la cara a Erick, yo lo hubiese hecho.

—Yo no soy tu. Por mucho que seas mi hermana somos polos totalmente opuestos.

—Lo sé, por eso siempre es divertido hablar contigo porque eres como una persona de una cultura muy lejana a la mía.