¡Hasta que los fantasmas nos separen!

11. Sentirse solo.

Pov's Plan

Ya habían pasado algunos días desde que había visto a Mean por última vez, y ya empezaba a sentirme solo de nuevo, porque a pesar de que no había estado tanto tiempo con el castaño me estaba acostumbrado a despertar en su compañía o las pequeñas platicas que teníamos acerca de lo que podía ver con su entonada y dura voz, y a pesar de que todo se podía resolver simplemente con una llamada, había un pequeño problema con eso.

En todo este tiempo había olvidado pedirle su número de teléfono.

Aunque tal vez así sea mejor y ya no deberíamos vernos mas y no saber del otro, primeramente, porque seguramente Mean debería estar muy ocupado con la universidad y trabajo, y la segunda porque no quiero que le puedan lastimar por mi culpa.

En fin, supongo que era mejor así.

—¡Buen día muchacho! — Me saludo mi jefe muy animadamente entrando a la librería— ¿Cómo ha ido todo por aquí? — Pregunto quitándose la bufanda, y dejándola sobre el mostrador.

—Ha estado muy tranquilo— Dije dejando el libro que había estado hojeando sobre su estante— No hay muchos clientes últimamente.

—Eso supuse— Dijo sin borrar su expresión alegre para después tomar su lugar tras el mostrador—Bien si ya terminaste tus deberes ya puedes irte.

—¿Irme? Pero apenas es medio día— Conteste

—Has estado quedándote hasta tarde los últimos días, ¡Mereces un descanso! — Comento tomando una pequeña libreta y un bolígrafo que estaban sobre el mostrador—Anda ve y diviértete un poco.

—Muchas gracias— Dije asiento un pequeño wai para después tomar mi abrigo que estaba sobre el perchero cerca de la entrada—Nos vemos mañana— Me puse mi abrigo y Sali de la librería comenzando a caminar con dirección a la parada de autobús.

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Una vez que llegue a casa me encontré en la puerta a mi madre y a Cherreen, ambas estaban recargadas en el portón negro, tal vez pensando en donde estaba o a qué hora llegaría. Solté un pequeño suspiro para después, acercarme a ellas llamando su atención.

—¿Llevan mucho esperando? — Pregunte un poco nervioso, llevándome una mano a la nuca

—No casi acabamos de llegar— Respondió con amabilidad mi madre—Vamos a entrar ¡Me estoy congelando! — Asentí controlando un poco mas mis nervios, al parecer hoy estaban de buen humor.

Abrí el portón dejándolas entrar primero teniendo en su rostro la misma expresión de la primera vez al cruzar el jardín hasta llegar a la puerta. Una vez adentro de casa ambas dejaron sus abrigos sobre el perchero y se adentraron a la sala, tomando asiento sobre el sofá.

—¿Aun tienes eso aquí? — Pregunto Cherreen señalando la carpa frente al sofá, en una mueca extraña—¿Hace cuanto que no limpias decentemente? —Muy buena pregunta.

Últimamente con todo lo que había estado pasando no sabía exactamente cuanto tiempo había pasado en casa, aunque al parecer haba sido poco tiempo. Por otra parte, mi madre me miro curiosa uno segundos para después dejar salir una sonrisa emocionada, hace mucho que no la veía sonreír así.

—¡Vamos a ayudarte a limpiar! — Grito mi madre empuñando sus manos al aire—¡Yo ordenare el piso de arriba! — Se apresuro a decir para después salir disparada hacia arriba.

—Supongo que nosotros comenzaremos por aquí— Dijo mi hermana sonriendo—Aun guardas los utensilios de limpieza donde siempre— Asentí en respuesta. Cherreen se puso de pie y salió de la sala conmigo siguiéndole.

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Ya casi habíamos terminado con la sala, ya solo faltaba ordenar un pequeño librero café obscuro que estaba casi en un rincón de la habitación. Ahí generalmente guardaba papeles y libros que ya no usaba, por lo que actualmente ya no sabía que tanto acumulaba ahí dentro.

—¿Qué tiene esta caja? — Pregunto mi hermana con curiosidad, tomando entre sus manos lo que parecía un alhajero, color negro con el dibujo de una muñeca en la tapa.

En cuanto mi hermana abrió el alhajero comenzó a sonar una extraña melodía, junto a la figura de una pequeña bailarina de porcelana girando en círculos, y sobre esta estaba colgando un collar plateado de una cruz.

—¡Oh! ¿Aun guardas este collar? — Pregunto Cherreen dejando con cuidado la pequeña caja sobre el suelo, tomando el collar—¿Sabes de quién es?

—No recordaba que aun tenía esto— Dije cerrando el alhajero y botándolo dentro del librero, dejando un silencio entre ambos.

—Aun te persigue— Dijo casi en un susurro, evitando mirarme

—Voy a ver si ya termino mamá— Dije de forma casi cortante poniéndome de pie—Ya casi anochece—Comencé a caminar con dirección a las escaleras.

—Lo siento Plan— Dijo en un tono de voz más audible—Por haberte dejado solo todo este tiempo, pero estaba aterrada y...

En cuanto escuche su voz un poco más temblorosa Sali corriendo escaleras arriba. En cierto modo me sentía enfadado.

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Perdón por tardar tanto es que, ha sido una semana bastante ocupada x'D y bueno ya falta poco para el final

por otro lado ya vieron el teaser de <<2Wish>> la nueva serie de nuestros niños?