Valkiria

Personas Farolillo

¿Y si un día me volviera yo negativa?
¿Y si un día apagará mi alegría?
¿Que pasaría?
Y la gente... ¿Qué pensaría?

Resulta agotador intentar mantener mi llama encendida,
cuando estás rodeada de gente que no trata más que de apagarla.
Resulta casi imposible ser luz,
cuando la gente sumida en la oscuridad la rechaza.

Pero lo más irónico de todo,
es que cuando tú llama retiembla
y amenaza por endebilecerse,
tu malestar denuncian y tu chispa reclaman.
Las personas farolillo,
como me gusta llamarlas a mí,
no tenemos derecho a apagarnos,
no tenemos derecho a no seguir flotando ni iluminando.
Somos como estrellas
sin llegar a serlo,
porque iluminamos desde la tierra
en vez de desde el cielo.

Y ya llegando a mi caso,
tengo la necesidad de gritar en mi silencio.
¡Dichosos indecisos,
que no os ponéis de acuerdo ni con vosotros mismos!

¿Que debo hacer entonces?
¿Como debo actuar?
¿Sigo intentando iluminarte,
o te doy por imposible y me rindo ya?
¿Por qué no te dejas prender la mecha?
¿Es que no te das cuenta lo difícil que es alumbrar habiendo una sola vela?